¡Buenos días chicas!
Como os adelanté el lunes hoy os tengo preparado un post de decoración y DIY que espero que os guste y si alguien lo pone en práctica... ¡decídmelo que estaré encantada!
Primero de todo, vamos con los materiales. Necesitaréis:
Un tablón de ocumen, el mío es de 50x50
Pinturas a la tiza de diferentes colores
Pincel y brocha
Pegamento para madera
Barniz mate
Sierra
Lija
Maquinaria de reloj
4 listones de madera de 35 cm de largo
Tira de plomo adhesivo
Metro, escuadra, regla y lápiz
Cinta de carrocero
Dibujamos una circunferencia en el ocumen y la cortamos. Una vez tengamos el círculo, con ayuda del metro, la escuadra, la regla y el lápiz dividimos la circunferencia en 12 partes iguales y dibujamos un segundo círculo en el centro del tamaño del reloj.
Después cortamos el círculo interior y elegimos los colores y dónde y cómo los vamos a utilizar.
Ponemos cinta de carrocero en las líneas para cuando lo pintemos no pasarnos a la siguiente porción.
Una vez lo tengamos completamente pintado, nos toca ponernos a la obra con los números. Como véis yo ha habido unos que ya los tenía (los negros, que son de un reloj de alehop) y los blancos los he dibujado yo en un folio.
Dibujamos todos los números con un lápiz y los vamos pintando.
Después lo barnizamos todo y cuando se haya secado pegamos la maquinaria (es también del reloj de alehop que os decía antes) con pegamento para madera.
A continuación, damos la vuelta al reloj para pegar los listones de madera, que cumplen una doble función: que el ocumen no se abombe y que el listón que queda en la parte de arriba sea donde coloquemos la hembrilla necesaria para colgarlo en la pared.
Los pegamos en forma de cuadrado.
Dejamos secar y poco a poco vamos pegando el plomo adhesivo alrededor de las dos circunferencias y cada una de las líneas.
Colocamos la hembrilla en el listón de arriba y ya lo podemos colgar en nuestro rincón preferido. Yo lo he colocado en la pared principal del salón enfrente del sofá.
Y hasta aquí el post de hoy. Espero que os haya gustado y os sirva de inspiración.
Fuente: este post proviene de Con N de Noemi, donde puedes consultar el contenido original.
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