Aprender a hacer un alargador a tu medida es lo más útil que puedes hacer en estos momentos. Piensa cuántas veces nos hemos dispuesto a trabajar con herramientas eléctricas y nos hemos encontrado con que no existe ningún enchufe cercano. O incluso, utilizando un alargador no hemos conseguido llegar al lugar deseado. Generalmente, en los comercios encontramos cables auxiliares de medidas estándar que pueden resultarnos insuficientes. Para que nunca más tengas que cambiar tus planes por culpa de este problema, te enseñamos a fabricar un sencillo y cómodo alargador.
Este pequeño aparato no es más que un cordón eléctrico que nos permite aumentar la longitud de un cable terminado. Consta de tres partes básicas: una clavija macho, otra hembra y cable, también llamado manguera. Podemos encontrar alargadores multiclavija (hembra) a los que conocemos como regletas o ladrones.
¿Qué necesitas?
Con sólo tres herramientas podrás fabricar tu propio alargador: un pelacables, unas tijeras y un destornillador. Los materiales son también sencillos de conseguir: dos clavijas, una macho y otra hembra, y un cable.
A la hora de elegir este último elemento debes tener en cuenta la distancia que necesitas cubrir. Recuerda que un alargador puede tener diferentes momentos de uso y por lo tanto el espacio a recorrer puede variar. En cualquier caso, escoge una medida superior a la longitud mayor, como previsión de futuro. Otro aspecto importante es saber si los aparatos que vamos a conectar necesitan toma de tierra, en caso afirmativo, la manguera debe disponer de tres cables: negro, azul y verde-amarillo. Este último desaparece en caso de que no se necesite toma de tierra.
La elección de las clavijas depende de dos variables: en primer lugar, las herramientas o electrodomésticos que vayas a enchufar. Y en segundo lugar, de si el cable posee toma de tierra o no.
Empieza a trabajar
Sigue estos pasos que te detallamos a continuación para fabricar tu alargador eléctrico sin ningún problema.
1. Desmonta la clavija macho. Para ello, tendrás que desatornillar el cierre.
2. Corta la funda exterior del cable o manguera unos 2 cm. En su interior encontrarás tres conductos de diferentes colores: el negro, gris o rojizo se corresponde con el componente activo; el azul con el neutro; y el verde-amarillo (que puede no aparecer) es la toma de tierra.
3. Pela los cables de colores 1 cm. aproximadamente. Utilizar el pelacables es muy fácil: introduce la parte a recortar en la tenaza, cierra la misma, y tira para arrancar el plástico. Aparecerán los hilos de cobre que transportan la electricidad.
4. Coloca cada cable en su vástago correspondiente. Los cables de color azul y negro irán en los extremos, mientras que el verde-amarillo ocupará la posición central. Cierra la clavija.
5. Repite la operación en la clavija hembra. Pela los cables y coloca cada uno de ellos en su borne correspondiente.
Antes de conectar el alargador a la corriente de luz comprueba que no han quedado hilos de cobre sueltos en ninguno de los dos extremos ya que se podría producir un cortocircuito.
Si el alargador está pensado para ser utilizado de forma continuada en un único electrodoméstico, puedes instalar una canaleta para que éste quede pegado a la pared y moleste lo menos posible. Para ello, una vez realizado el trabajo, enchufa el aparato eléctrico a la clavija hembra. Ve siguiendo el recorrido del cable hasta el enchufe de pared y al mismo tiempo coloca una guía que lo recubra. Las canaletas suele tener cintas autoadhesivas que permiten fijarlas a la pared sin problemas.
Electricidad y seguridad
En el caso de la corriente eléctrica es imprescindible respetar hasta el último detalle en cuanto a normas de seguridad se refiere. No olvides que una errónea manipulación puede provocar graves accidentes. Recuerda:
* Siempre que vayas a trabajar con cualquier aparato eléctrico, desconéctalo.
* Corta la corriente eléctrica para realizar cualquier reparación del circuito.
* No manipules electrodomésticos descalzo y con tu cuerpo mojado.
* Nunca sustituyas fusibles por otros de mayor intensidad.
* Si fijas cables a la pared no lo hagas con grapas ya que podrían influir negativamente en el circuito eléctrico.
* No sobrecargues los ladrones o regletas.
* Si descubres un enchufe deteriorado, cámbialo cuanto antes para evitar accidentes.
* Presta especial atención en el baño: nunca instales enchufes encima del lavabo o la bañera.
* Cuidado con los niños, sobre todo los más pequeños.
* No intentes arreglar o manipular la instalación eléctrica si desconoces la técnica, llama a un profesional y evita sustos innecesarios.