Antes.
Después.
Nadie discute que Ikea es el mayor gigante de decoración low cost que existe, yo soy la primera que le hace visitas continuas, claro que reconozco que tenerlo cerca es una ventaja.
El problema está en que cuando todo el mundo tiene la misma decoración y objetos es realmente aburrido, y las casas se hacen demasiado impersonales.
Por eso lo divertido es "tunear" sus objetos y que cada uno le imprima su propia personalidad.
Hoy con la ayuda de mis queridas amigas de la de RED facilisimo, os presento 5 clásicos que todo adict@ al gigante sueco reconoce, que nunca han sido descatalogados y sobreviven a pesar de que llevan ya un montón de años dando guerra. Evidentemente todos han sido transformados.
El taburete Frosta que Piola de Hampton-SC abriga con una funda de trapillo para que no pase frío.
La mesilla Hemnes que Olga de Un columpio en el jardín transforma con Chalk Paint y que le ha quedado muy elegante.
La mesa Lack de Mónica y que podéis ver en Manualidades y tendencias, irreconocible con washi tape.
El socorrodísimo espejo Malma que es genial para transformar y que en El Rincon de las cosas bonitas lo utilizan para colgar collares.
Yo también lo tengo tuneado con la técnica del decoupape y unas servilletas que compré en una tienda de manualidades.y que podéis ver en Espejos malmas
Y la cómoda Rast de mi artículo Rast Return pintada en dos tonos y que decoré con stencil.
Ya sabéis pasaros por sus blogs que os mostrarán el paso a paso de cómo se hacen.
¿Os animáis a transformar Ikea?
Besotes y que paséis un gran día
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