La norma indica que la instalación electrica se debe revisar cada diez años pero no está de más que sepamos una serie de consejos para poder hacerlo nosotros de vez en cuando teniendo en cuenta la posibilidad de avisar a un experto si encontramos alguna cosa que no vaya bien sin tener que esperar los diez años. Es sencillo, no nos llevará nada de tiempo y ganaremos en seguridad .
En primer lugar debemos revisar el cuadro eléctrico. Para ver si funciona correctamente tenemos un botón de prueba que podemos pulsar de vez en cuando. Al apretar este botón se interrumpe la corriente y dejamos de tener electricidad en nuestra casa. Si esto no ocurriera deberíamos avisar a un técnico. Si la instalación eléctrica no es demasiado antigua, además tendremos normalmente un limitador de potencia. Estos limitadores suelen saltar de vez en cuando pero debemos observar si saltan muy a menudo porque podría ser peligroso, en este caso tendríamos que avisar a la compañía eléctrica.
Lo siguiente que debemos chequear son los enchufes e interruptores. Si vemos que algún enchufe o interruptor está un poco separado de la pared o deteriorado lo mejor es cambiarlo, al igual que con los casquillos de las lámparas. Es el momento perfecto para cambiar los enchufes que tengamos por otros con toma de tierra que nos proporcionen mayor seguridad.
Si periódicamente revisamos todos estos elementos es probable que no tengamos nunca ningún problema con la electricidad. Sin embargo, la comprobación debe ser segura igualmente: debemos usar destornilladores específicos de aislamiento y desconectar el interruptor general del cuadro eléctrico siempre que vayamos a realizar cualquier comprobación.
¡Animaros a revisar vuestra instalación eléctrica! . Como habéis visto no es nada difícil y ganamos en seguridad.
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