Los muebles de madera deben tener un sumo cuidado. Y aveces, tienden aparecer manchas que son difíciles de quitar. Puesto que, en fechas de celebración, los grandes damnificados de los excesos provocados por la alegría, y la consiguiente despreocupación, suelen ser nuestros muebles. Por eso es el mejor momento para que añadas a tu documentación sobre la madera varios consejos útiles que te permitirán hacer desaparecer hasta la última huella festiva de tu mobiliario.
Cercos de recipiente o quemadura de cigarro: Frota en el sentido de la veta con ceniza de cigarrillo y aceite de oliva. A continuación limpia con un paño seco y saca brillo.
Manchas sobre pino sin barnizar ni encerar: Aplica gasolina de mechero y después una esencia de trementina y aceite de linaza crudo a partes iguales.
Grasa en maderas enceradas: Utiliza un paño mojado en aguarrás. También puedes pasar un trapo escurrido
con agua y humedecido en amoniaco y aplicarlo sobre la mancha de manera rápida. Para acabar la operación sécalo sin dejar pasar más de un minuto.
Restos de cera de vela: Calienta la cera y extiéndela con un paño humedecido en aguarrás.
Manchas de tinta: Aplica un papel secante y alcohol de quemar. Si después de esto todavía quedan restos la única solución será lijar con cuidado y volver a encerar.
Óxido de hierro: Pasa un algodón con agua oxigenada y acláralo después con agua tibia y amoniaco.
Manchas blanquecinas: Utiliza nogalina más o menos rebajada con agua según el tono deseado. Deja secar y frota la mancha con un estropajo de esparto. A continuación encera de nuevo la madera.
Eliminar pegatinas: Frota con amoniaco o aguarrás. Aplica después un poco de limpiacristales y acláralo.