Una nueva generación de dispositivos en las cocinas y los baños combinan las funciones típicas con sistemas inteligentes adicionales.
Mientras en la primera plana de las novedades de la era de Internet se ha ido colocando la informática y las telecomunicaciones, la tecnología también ha penetrado en sectores más tradicionales que no han querido ni podido quedarse descolgados de la vorágine de la tecnificación. La electrónica de consumo es de uno de los sectores que más avances han introducido en sus productos y tal es así, que un electrodoméstico de hace seis o siete años al cual dábamos una utilidad concreta, hoy en día puede ofrecernos en un modelo actual un ramo de posibilidades que supera con creces a las facultades hasta ahora habituales. La implantación de la tecnología digital en electrodomésticos tan comunes como frigoríficos, lavadoras, hornos, lavavajillas, e incluso en lo que se refiere al equipamiento sanitario en baños, ha dado lugar a una nueva generación de dispositivos que combinan las funciones típicas de cada uno con sistemas de procesamiento, automatización y control adicionales.
En las cocinas
Introduciéndonos en este ámbito, encontramos una gran gama de dispositivos que tratan de facilitar y agilizar los procedimientos tradicionales en este entorno. Más concretamente en el sector de los frigoríficos ha surgido una nueva generación que permite, a través de una pantalla ubicada en el frontal del mismo, la comunicación y la interacción bilateral con el usuario. De esta manera es posible programarlo con la finalidad de seleccionar la temperatura concreta a la que ha de mantener los alimentos, poner en funcionamiento la opción de enfriamiento rápido para los casos en que se precise que el proceso de refrigeración lo lleve a cabo con mayor rapidez e incluso si se va a estar una temporada ausente, activar una función que se ocupará de examinar los alimentos que están en su interior e informar al usuario a su regreso de cuáles se encuentran en malas condiciones.
También se han presentado - principalmente durante el presente año 2002 y en diversos foros de negocio como son las ferias y congresos del sector de la tecnología en el hogar - otros electrodomésticos con capacidades adicionales. Por ejemplo, han aparecido lavavajillas que son capaces de optimizar de manera automática cada lavado y realizar el más eficiente de sus programas en función de la suciedad o del nivel de carga, así como hornos que cocinan más rápidamente de forma tradicional -no como los microondas-, se limpian automáticamente sin necesidad de emplear producto químico alguno, e incluso disponen de memoria capaz de almacenar cientos de recetas con los requerimientos de regulación de calor apropiados para cada ocasión.
En los baños
Aunque a priori pueda parecer que el entorno de los baños ha quedado un poco apartado del desarrollo de la tecnología doméstica -entendiendo como tal la aplicación de la misma en el hogar con el propósito de incrementar la calidad de vida en la vivienda-, también en este sentido los diseñadores se han implicado en el desarrollo de sistemas sanitarios automatizados.
En los últimos tiempos ha ido apareciendo e implantándose de manera paulatina un completo equipamiento para el baño que, si bien es cierto no ha supuesto un salto cuantitativo respecto a lo previamente existente, sí que ha sido cualitativamente significativo.
Los sistemas tecnológicos para baños se han asentado sobre la base de la automatización: inodoros con sensores que detectan la presencia de una persona, los cuales realizan descargas automáticas de la cisterna una vez se ha finalizado su uso; sistemas de autolimpieza tras el uso de los elementos sanitarios; grifos y duchas con sensores que tratan de minimizar el consumo de agua mediante la detección de presencia; secadores de mano mediante aire con control por detectores o programable.
Por otro lado también son de importancia los sistemas de calefacción que han aparecido. Tanto para calentar el agua como para el global del hogar, el equipamiento térmico incluye todo un sistema de gestión remota a través de las líneas de comunicaciones instaladas en el hogar.
Características comunes
Todo este tipo de dispositivos para la cocina y los baños ya están comenzando a aparecer en el mercado de la mano de marcas como Siemens, Ariston o Fagor, y en general, presentan una serie de características comunes como la presencia de una pantalla LCD en el frontal que permite la programación y manipulación de los mismos, la facilidad de uso, y desde el punto de vista técnico el empleo de sensores de control de los diversos factores.
Pero la evolución no ha quedado aquí y una de las principales tendencias en esta materia y que ya desde hace años se viene barajando, es la de incluir en los mismos la posibilidad de acceder a Internet -sobre todo en los equipos de mayor tamaño-. Con esta finalidad han aparecido prototipos de neveras que incluyen un ordenador que posibilita el acceso a la Red para, por ejemplo, realizar la compra o simplemente navegar en la web.
Integración en el hogar actual
El concepto de hábitat según la acepción más tradicional de lugar de condiciones apropiadas para vivir, va cambiando paulatinamente hacia una nueva concepción. En lo que respecta directamente a los electrodomésticos denominados 'inteligentes', así como a los sistemas tecnológicos en los baños, posiblemente aún reste algún tiempo para que su implantación en el hogar actual sea un hecho consumado. Hoy en día resulta evidente que no nos topamos con elementos evolucionados en los baños de las casas, y mucho menos los públicos nos dan las ventajas que la tecnología ha puesto al alcance de todos. Asimismo y en el mismo sentido, las cocinas actuales restan aún mucho de lo que todavía sigue resultando una auténtica entelequia.
Probablemente lo que impide que todo este desarrollo llegue hasta nosotros sean los precios de venta al público, pues no son aún todo lo buenos que sería deseable y tal vez sea ésta la principal razón. Sin embargo el tiempo irá poniendo los elementos y los costos en niveles alcanzables por una gran mayoría. La tecnología ha ido cubriendo todas las áreas y por supuesto, el ámbito de la cocina y los baños no se ha visto desplazado de una evolución cuyo precepto fundamental radica en hacernos la vida mucho más cómoda.