A continuación les vamos a dar algunos consejos para tu buhardilla. Las buhardillas son ese espacio de la casa que podemos emplear para casi cualquier uso. No tiene una utilidad concreta, cada familia puede decidir en qué emplear ese lugar. Por eso, las posibilidades a la hora de decorar el ático o buhardilla son infinitas.
En función del provecho que vayamos a sacarle, vamos a dedicarle mayor o menor atención. Pero, en cualquier caso, aquí os damos cinco consejos para tu buhardilla.
Aprovechando cada rincón
Una de las ventajas de todas las buhardillas es su espacio diáfano, lo que nos amplía las posibilidades para aprovechar cada rincón. Por eso, una de las soluciones más prácticas es construir estanterías a medida. Este es uno de los consejos para tu buhardilla
Las estanterías nos permiten cubrir huecos que en principio nos podrían resultar inútiles, como los rincones con techos bajos. Del mismo modo, podemos construir estanterías a diferentes alturas y en forma de escalera para que encajen con la forma abuhardillada.
Otra idea es, si tenemos vigas, aprovechar las zonas más altas para colocar baldas entre ellas, de manera que podamos aprovechar también ese espacio.
Como no, el pladur es también una de las mejores opciones, pues es muy fácil acoplarlo a las diferentes alturas, anchos y rincones.
Forrar las paredes
Muchas familias utilizan la buhardilla como un espacio de esparcimiento y diversión conjunta. Por eso, debe convertirse en un lugar acogedor y cálido. Una opción para ello, aunque siempre depende de los gustos, es forrar las paredes de madera. Para ello, tendremos que atornillar un par de listones horizontales de madera por la pared, a los que luego irán clavados los tablones. Para las esquinas y ventanas deberéis usar molduras y, además, tened en cuenta los huecos de los enchufes e interruptores. Podéis ir haciendo la forma de los mismos sobre la marcha.
Si las paredes de madera nos van a resultar un poco excesivas y recargadas, podemos optar por forrar las paredes con papel, una tarea realmente fácil de llevar a cabo.
Techos de madera
Si queremos darle a nuestro ático un estilo más rústico o queremos ocultar grietas y desperfectos, podemos colocar vigas de madera en los techos. Una opción muy sencilla es utilizar vigas de poliuretano de imitación a madera, que se pueden pegar al techo, pues están compuestas de resina sintética y están huecas por dentro.
Este material es mucho más económico y su deterioro es mucho más lento que en caso de la madera, ya que aguantan mejor la humedad y los cambios de temperatura.
Una buena iluminación
A la hora de iluminar nuestro ático, la mejor opción son los halógenos, pues suelen ser espacios muy amplios por lo que necesitarán varias tomas de luz. Además, podréis instalarlos vosotros mismos son un taladro y una sierra de corona.
Por otro lado, puede que queráis crear un entorno más rústico, por lo que, en este caso, podéis fabricar una lámpara grande central como la de la usuaria Noeda44.
Separando espacios
Como ya hemos dicho, las buhardillas son espacios diáfanos, pero eso no quiere decir que tengamos que dedicarlas a un solo uso, solo hay que saber crear diferentes espacios. Para ello, por ejemplo, podemos construir un armario que vaya hasta el techo y que haga las veces de pared.
Agradecimientos: a Homedit, Kaboodle, The Riley's blog, Brighton Carpentry, Alcove Cabinents, Just Over the River, Petruntibros, JV Carpentry y Lamps Plus
