Recientemente, limpiando la casa tras la salida de un grupo, cuál fue mi sorpresa al levantar el mantel de la mesa de la cocina, ?encimera rota?. Pero mucho.
A sique me toca hacer una nueva, la verdad es que tenía ganas de hacer algo con ella, cuando abrí la casa la hice deprisa y corriendo y no me gustó como quedó, pero no tenía tiempo; en aquella época el taller de artesanía iba muy bien y tenía trabajo, por lo que la deje como estaba.
En esta ocasión decidí hacer una mesa que si por un casual hace falta en el salón poder unirla a la mesa del comedor.
MATERIALES
Tabla de madera del tamaño que necesites
Nogalina
Pinturas acrílicas
Pinceles de diferentes tamaños y una brocha
Motivos a dibujar y lapicero
Barniz
Patas y tornillos que no sobrepasen el grosor del tablero
Destornillador
Lija
EL PROCESO
Lo primero que hice fue teñir la tabla para oscurecerla un poco e igualarla con el resto de la cocina. Yo utilizo nogalina en polvo.
Para preparar la nogalina hay que mezclarla con agua, depende del tono que quieras tendrás que variar la proporción, prueba con la tabla del revés para ver el tono que te queda y si es el adecuado o no. Añade agua o nogalina para aclararla u oscurecerla.
Cuando esté seca pasa una lija suave, se aclara un poco. ¡Tenlo en cuenta!
Después comencé con la decoración, comencé con las flores del borde, Cree un pequeño patrón para colocar las florecillas pero en los colores no seguí ningún orden, fui haciéndolo según me pareció.
Tras un ratillo, y una vez secas las florecillas, comencé con el texto del centro.
Primero hice el bocadillo donde va el texto y lo pinté con blanco, pero sin dejarlo completamente cubierto, dejando zonas más claras.
Cuando esté seco hay que escribir el texto ?¡a comer!? y comenzar a pintar.
Para rematarlo lo lijé un poco para desgastar partes y pareciese antiguo, pero eso va en gustos. ¡Y a barnizar!
Muy importante, yo lo barnicé (no he puesto imagen, pues ya lo hice en el anterior D.I.Y. Reinventa)tres veces para proteger bien pues es una mesa que se va a usar mucho.
En el mercado hay muchos tipos de patas, yo compré unas económicas, metálicas, pero lo ideal sería de madera. Aunque va en gustos, es una elección particular.
Marqué los puntos donde irán los tornillos.
Fíjate que sean del tamaño adecuado, a mí me pasó que los compre un poco largos y tuve que cambiarlos.
Con un destornillador, fijé bien los tornillos.
Y ¡A colocarla en su sitio! ¡Lista para usar!
Para el próximo miércoles tengo preparados unos llaveros personales para los alojados de la Casa Rural ?LMDY?.
¡Hasta pronto!