Herramientas que necesitas:
* Medidor de humedad. Este aparato es muy práctico, pero su precio es bastante elevado.* Espátula y paleta.
* Cepillo de púas de latón.
* Rodillo y pincel.
* Lija.
Primer paso, retirar el material afectado
Para arreglar los desperfectos que aparecen en estos tabiques a causa de la humedad, debes hacer lo siguiente:1. Si cuentas con un medidor de humedad, comprueba que ésta es superior a la media general. Si no, observa si la pintura se ha levantado.
2. Golpea la unión entre rodapié y tabique tocando sobre éste. Utiliza el mango de alguna herramienta. Si el sonido es seco significa que está bien adherido a la pared, por lo que no tendrás que despegarlo.
3. Levanta todas las zonas deterioradas hasta llegar a un punto donde el muro esté en buenas condiciones. Una vez picado, tendrás que rellenar de nuevo los huecos resultantes.
4. Elimina el material sobrante con un cepillo de púas de latón.
5. Pasa un papel de lija de grano medio por el resto de la pared para que el tratamiento y el acabado agarren con facilidad.
No olvides
Cuando hayas eliminado las partes estropeadas debes aplicar un producto endurecedor para evitar que el material siga desprendiéndose. Para ello, protege las zonas que rodean a la pared (se trata de un líquido difícil de limpiar) y aplica el producto con un pincel. Hay que pintar el muro
Antes de comenzar a pintar es necesario llevar a cabo una serie de pasos:1. Aplica una mano de impermeabilizante por toda la pared. Utiliza el rodillo para ello.
2. Una vez seco, rellena los huecos con masilla para emplastecer las paredes. Alisa bien la pasta con la espátula; de esta forma, luego tendrás que lijar menos para igualar la superficie.
3. Aplica dos capas de pintura plástica. Entre una mano y otra debes dejar pasar 24 horas.