De este modo, vamos a hacer un breve repaso por los niveles de ruido que se consideran dañinos para el ser humano y que pueden implicar consecuencias:
- Umbral que provoca cambios en la calidad del sueño: 35
- Umbral de fastidio general de la población: entre 45 y 55
- Interrupción del sueño: entre 60 y 70
- Umbral en el que el ruido pasa a ser molesto para el 60%-90% de la gente: 80
- Riesgo de daños auditivos: 80
- Riesgo de daño vestibular: 130
Ya sabemos qué umbral de decibelios puede tener consecuencias nocivas pero, ¿cómo saber si nuestra vivienda supera dichos niveles? Para ello podemos hacer uso de aplicaciones que podemos descargarnos en el móvil y que nos permiten registrar el nivel de decibelios que se están produciendo en un momento concreto en casa. Y es que, aunque estamos habituados a realizar otro tipo de mediciones (longitudes, temperatura...), el ruido no es algo común de cuantificar y existe un gran desconocimiento general sobre el nivel de ruido que hay a nuestro alrededor. Así, para poder hacernos a una idea, vamos a ver los decibelios que generan ciertas actividades o situaciones, de menor a mayor nivel sonoro:
- 0 dB: Umbral de la audición.
- 10 dB: Equivale a la respiración tranquila.
- 20 dB: El ruido normal que hay en una biblioteca.
- 30 dB: El que general el tráfico ligero.
- 40 dB: Una conversación.
- 50 dB: Un grupo de personas.
- 60 dB: Una manifestación.
- 70 dB: Una motocicleta.
- 80 dB: Un tren.
- 90 dB: Cuando hay tráfico intenso.
- 100 dB: Una perforadora eléctrica.
- 110 dB: Es el nivel que suele haber en un concierto.
- 120 dB: El motor de un avión.
- 130 dB: El despegue de un avión.
- 140 dB: Traspasa el umbral del dolor.
- 150 dB: El que provoca una explosión.
Sin embargo, para entender esta relación debemos ser conscientes de que en el caso de los decibelios las cifras no equivalen a otro tipo de unidades. Se trata de una unidad logarítmica, por lo que hablar de 20 decibelios no equivale a hablar del doble de 10 dB, del mismo modo que la diferencia entre los 30 dB de un tráfico ligero y los 40 dB de una conversación no es proporcional a la diferencia entre los 110 dB de un concierto y los 120 dB del motor de un avión.
Aquí podéis encontrar más consejos para vuestra vivienda...