¿Tu cocina está vieja? ¿Tienes ganas de modernizarla pero te asustan las obras? Meternos en una obra no solo requiere una inversión sino también ganas. Si no crees que este sea el momento para ello, te proponemos hoy dos formas de cambiar los azulejos de cocina sin obra que la trasformarán.
Los azulejos tienen un gran peso visual en la cocina. Cambiarlos hará que la cocina cobre vida, que parezca nueva. Y es posible hacerlo sin obra, bien colocando sobre los viejos azulejos unos nuevos, bien pintándolos. ¿Te animas a intentarlo? Te contamos todo lo que necesitas para llevar este proyecto acabo.
Coloca azulejos nuevos sobre los viejos
Cuando los azulejos que decoran la cocina están no solo anticuados sino también deteriorados, todos reconocemos la necesidad de cambiarlos. Sin embargo, el miedo que tenemos casi todos a hacer grandes obras en casa, consigue que normalmente retrasemos el momento.¿Y si evitamos las obras? Para colocar azulejos nuevos sobre los viejos solo hacen falta ganas. Si, tu mismo podrás hacerlo si tienes disposición y tiempo para ello. Necesitarás, eso si, una lista de materiales para llevar acabo el trabajo con la mayor comodidad y los mejores resultados:
Azulejos nuevos
Pegamento específico para pegar baldosas sobre paredes alicatadas
Crucetas de 2mm
Llana dentada
Llana de rejuntado
Paleta
Mortero para las juntas
Esponja
Nivel
Una máquina de cortar azulejos
Un metro
Una cubeta para las mezclas.
Paso a paso
¿Ya tienes todos los materiales? Entonces ya puedes comenzar a cambiar los azulejos de cocina. ¿Cómo? Siguiendo el paso a paso que compartimos a continuación, trabajando de abajo hacia arriba y teniendo siempre presente la forma de utilizar cada material que propone su fabricante.Comienza por remover el adhesivo y aplicarlo sobre la pared limpia con la llana, utilizando la parte lisa, en una franja lo suficientemente extensa para colocar tres o cuatro azulejos. Asegúrate de que cubra completamente los azulejos viejos.
Después peina la pared con la parte dentada de la llana para uniformizar y conseguir las pequeñas y necesarias cámaras de aire.
Una vez bien extendido, coloca el primer azulejo comprobando que quede bien nivelado. Una vez nivelado, presiona con los dedos para que quede bien adherido.
A continuación, coloca las crucetas de plástico en los cuatro extremos de la baldosa para lograr que las juntas sean iguales y añade las siguientes piezas cerámicas alrededor.
Cuando termines de alicatar la pared espera a que el adhesivo seque completamente para retirar las crucetas de plástico.
Una vez hecho prepara la lechada con mortero para juntas y aplica la mezcla sobre los azulejos con la llana de rejuntado. Deja que seque.
Por último, limpia las baldosas con una esponja mojada.
Pinta los azulejos
La pintura es otra solución para cambiar los azulejos de cocina sin obra. Mas sencilla y mas económica que la de alicatar nuevamente la cocina. Un cambio de color hará que tu cocina parezca otra y solo necesitarás un par de días de trabajo para lograrlo.Existen diferentes tipos de pintura en el mercado que resultan adecuados para pintar estas superficies cerámicas. Puedes aplicar una capa de imprimación y después una pintura; aplicar un esmalte para azulejos; o una resina para azulejos de alta resistencia al desgaste cuya aplicación se realiza en dos pasos. Cuanto más especializada mas resistente es una pintura, pero puede ocurrir que se encuentre disponible en menos colores.
Paso a paso
Para guiaros en el paso a paso necesario para cambiar los azulejos de cocina con una mano de pintura nos centramos hoy en las dos primeras propuestas, aquellas que utilizan imprimación y pintura o directamente imprimación. ¿Empezamos?Limpia los azulejos, eliminando los posibles restos de cal con vinagre y desengrasando bien la superficie con un trapo empapado en acetona o alcohol.
Cubre el suelo con un plástico y protege los enchufes, interruptores y bordes con cinta de carrocero.
¿Vas a utilizar una pintura que requiere imprimación para favorecer su adhesión? Remueve la imprimación y viértela en la cubeta. A continuación aplícala con una brocha redonda en aquellos lugares a los que el rodillo. Después continúa con el rodillo, alternando una capa en una dirección y otra cruzada. Una vez aplicada la imprimación y sin esperar a que se seque por completo, retira la cinta de carrocero de los bordes para evitar que la pintura se desconche. Después, deja secar.
Protege de nuevo con cinta de carrocero todo lo que sea necesario y aplica ahora la pintura batiendo el producto antes. Hazlo siguiendo los mismos pasos que con la imprimación. y respetando los tiempos del fabricante entre capa y capa si necesitase mas de una. Como con la imprimación, recuerda retirar la cinta de carrocero antes de que se seque del todo.
¿Te atreverás a cambiar los azulejos de cocina sin obra apostando por una de estas opciones que hoy te planteamos? ¿Por cuál?