Mañana mismo muchos de nosotros estaremos dando la bienvenida al verano, mientras que muchos de nuestros amigos del hemisferio sur estarán recibiendo al invierno. Por eso, hoy vamos a dedicar este espacio a un tema más invernal, las chimeneas, y, en concreto, a las ventajas que supone tener instalados cassettes o chimeneas incrustadas.
En general, el uso de una chimenea supone un gran ahorro en calefacción. Además, permite calentar de una manera muy rápida una habitación, por lo que es perfecta, sobre todo, para segundas residencias. En cualquier caso, el uso de las chimeneas incrustadas o cassettes, reúne las siguientes ventajas:
1 Las chimeneas incrustadas impiden la expansión del humo por la casa, algo que puede resultar realmente incómodo y, además, llegar incluso a causar problemas respiratorios.
2 Además, relacionado con lo anterior, tenemos también la gran ventaja de reducir la suciedad que proporciona la ceniza y demás restos de la combustión.
3 Por otro lado, es mucho más seguro este tipo de chimeneas que las tradicionales, ya que se reduce el riesgo de posibles incendios. Además, también impedirá posibles accidentes, sobre todo cuando tenemos pequeños en casa.
4 Por su parte, las chimeneas incrustadas aprovechan mucho más la combustión de la leña y el aire de la propia estancia, que recoge y devuelve como aire caliente, por lo que tienen un mayor rendimiento y calientan mucho más rápido. Así, esta cuestión implica un mayor ahorro energético. Además, el tipo de calor que genera es mucho más constante.
5 En función de la disposición de la chimenea, algunas instalaciones permiten realizar una salida de aire a otra habitación, de modo que podamos calentar dos estancias. En este caso, contamos además con la ventaja de que el tubo de evacuación del aire que asciende hasta la salida de la chimenea hace que el aire, al ascender, no se enfríe.
Así que ya sabéis, tanto si estamos en verano como en invierno, podemos aprovechar el tiempo para instalar nuestro cassette o chimenea incrustada.
¿Qué os parece la idea?
Fotos: Chimeneaserre y Picos de Europa