Más de una vez nos sentimos algo inseguros, por no decir chapuceros, recurriendo a tretas diversas para lijar o cortar cómodamente una pieza Cuando afianzamos sucesivos apoyos que nos facilitan ese trabajo, ¿estamos actuando como bricolegas solventes, o como domingueros?
Aquí tenemos la respuesta Es el banco de un consumado experto, que como podemos deducir se gana la vida construyendo guitarras.
El tornillo de banco aprisiona una tabla colocada a casi 45º. La inclinación brinda una amplia superficie de agarre, lo que se traduce en una extensión bien firme.
Y el artista ya puede utilizarla para sujetar con mordazas la pieza que está trabajando Así gana comodidad y exactitud en el trabajo con la lima.
¿Os resulta familiar ese tipo de recurso?
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