Hoy vamos a darle un lavado de cara a una cocina y unos baños para ponerlos a la altura de esta preciosa vivienda.
A primera vista, esta cocina no demanda una reforma, pero en detalle, por un incorrecto mantenimiento, la encimera está muy ajada y los frontales totalmente deslucidos, a lo que hay que añadir el desaprovechamiento de sus hermosos 12 m2. De la lámpara, ni hablamos.
Vamos a solucionarlo...
Para aportar luminosidad, además de hacerle una profundísima limpieza, se ha procedido a pintar los frontales y sustituir la encimera por un tablón de pino larix de 4 cm., así mismo, hemos quitado el viejo zócalo y hemos colocado moderno aluminio en su lugar. El frigorífico se ha semiempotrado detrás de un costado.
Aprovechando el tamaño, hemos hecho una zona de comedor adaptando otro tablón de pino a unas patas de forja a juego con las sillas. Muy acogedor ¿verdad?. La lámpara no ha salido en la foto, pero como imagináis, la hemos sacrificado y sustituido por una lampara de embudo que emula a las industriales.
Poco puedo decir de esto.
Unas chorraditas baratísimas que lo cambian todo.
En toda la iluminación de baños y pasillos se han colocado focos empotrados.
Este baño, aunque amplio y luminoso, es aburrido y carente de estilo. Vamos a tocarlo con la varita...
Chulo ¿eh?. No hemos hecho una obra faraónica, pero hemos conseguido el efecto deseado con este estiloso mueble con lavabo y un poquito de almacenaje.
EN LA PRÓXIMA ENTRADA VEREMOS UN SALÓN Y UN RECIBIDOR MUY CHIC. CIAO.