Hace algún tiempo que explique unas recomendaciones para usar este tipo de envases. Es una forma cómoda de transportar y disfrutar del vino. Además la caja es de un cartón muy fuerte. Son 15 litros los que hay dentro, y tienen que llegar en perfectas condiciones a nuestras casas, así que el recipiente tiene que ser fuerte, para cubrir cualquier contingencia.
Después de acabado el rico caldo, que es de las bodegas Navajas, de la rioja, vino muy recomendable, extraemos la bolsa interior, y cerramos perfectamente los orificios que tiene la caja, así como las solapas. Incluso en el lado ya cerrado, he puesto una vuelta de precinto, para que quede mas sujeto. También pongo precinto por donde voy a hacer el corte de la tapa. La cebra era un poco escéptica al principio, pero luego le gusto el resultado.
Con la ayuda de una regla y una navaja hacemos el corte. He empleado una navaja (un cuchillo también sirve) porque tiene una cuchilla mas fuerte que un cúter, y esto facilita el corte recto, ya que el cartón ofrece bastante resistencia.
El lado no cortado de la caja, también esta reforzado con una tira de precinto, en la zona interior y exterior de la bisagra.
Por la parte interior de la caja he pegado, también con precinto, unas tira de cartón, para que la tapa no se mueva cuando esta cerrada.
Las tiras las he sacado de un cartón de los que se usan en las primeras entregas de las colecciones de fasciculos.
Las tiras están pegadas con precinto por dentro, y luego por fuera se pega otra, siguiendo la forma del borde.
La foto esta movida por motivos naturales (poca luz, posición un tanto forzada...), no porque me haya acabado el contenido de un tirón, para hacer este paso a paso.
Con todo ya puesto, el cierre de la caja es perfecto. Siempre habrá que hacer un pequeño ajuste para que cierre bien, porque las esquinas pueden ser complicadas. En mi caso he forrado todo el borde de la tapa con precinto, para que el cartón no se deforme, y de esta forma ha cerrado mejor, ya que el cartón ya empezaba a movilizarse.
También le he puesto un tirador, para facilitar la apertura y cierre. El tirador es reciclado de una armario al que le cambiamos la imagen con tiradores nuevos.
Otra vista del interior de la caja. Todo este proceso ha durado apenas una hora. Es una caja muy dura, que estaba empleando para almacenar cosas en el garaje, pero hace tiempo estaba pensando en las otras posibilidades que ofrecía. Y con un poco de tiempo libre, pues ha salido esto.
Bien, pues este es un principio, porque esto no es mas que un prototipo. Visto que funciona bastante bien, ahora hay que ver la forma de forrarla, o aumentar las funcionalidades con, por ejemplo, un cajón, algún tipo de ferretería, cantoneras o asas o patas o cierres o .....
En los próximo intentos, también perfeccionaremos el montaje, abusando menos del precinto, y encolando o pegando o lo que sea, las tiras de cartón del cierre y otras partes.
Pues esto es todo por ahora. Hasta otra.