En mente tenía una estantería o un mueble que se adaptara a la pared en diagonal del fondo de la habitación, y para eso fabriqué unas baldas con esa forma. El resultado no es que fuera malo, pero a mí no me entusiasmaba mucho y por eso decidí que quería otro tipo de mueble para esa zona. Y así acabé trabajando en éste árbol.
Materiales:
Papel de estraza, cartón o cualquiera que sea grande
Listones de abeto. 18mm de grosor.
Tablero de madera de pino. 18mm de grosor.
Tablero de densidad media. 3 mm grosor.
Tablero de contrachapado. 3 mm color blanco.
Tornillos.
Pletinas y escuadras de unión.
Cola.
Imprimación selladora.
Esmalte acrílico blanco.
Fabricando un mueble árbol:
Estructura de madera:
Saber la forma y tamaño que va a tener nuestro mueble árbol nos ayudará bastante en el proceso de creación. Para ello, una buena práctica es pegar papel a la pared y dibujar sobre el mismo la forma que más nos guste y que se adapte al tamaño que tengamos.
Una vez que tenemos claro qué figura y qué tamaño queremos, lo siguiente es ponernos a cortar los listones de madera. Se pueden cortar a mano con una sierra o con sierra de calar eléctrica para obtener los listones e ir dibujando con ellos la misma figura que hemos hecho en el papel. Cada una de las secciones de madera que vayamos haciendo las vamos pegando entre sí con cola. Aunque también podéis cortar todas las piezas y pegarlas al final.
Obtendremos una forma con los listones y con recortes de madera igual que la que habíamos dibujado. Esta misma forma la tenemos que hacer por duplicado, así conseguimos que nuestro árbol tenga “volumen” al añadir otros listones transversales.
Si no queremos que nuestro mueble árbol se desarme, tenemos que reforzarlo con pletinas y tornillos en todas sus uniones. Puede ser muy desesperante, que después de haber cortado y pegado todas nuestras piezas se nos venga abajo cual castillo de naipes.
Recubrimiento:
Cortamos piezas a medida de tablero de densidad media. Las cuales iremos uniendo a nuestra estructura por la parte externa. Toca armarse de paciencia, sobre todo si el dibujo que hacemos es algo complejo, aunque merece la pena el esfuerzo.
Estas piezas, a parte de encolarlas a la estructura, quedaran mucho mejor si las atornillamos a la misma.
Nos queda aún vestir la parte frontal de nuestro árbol. Para conseguirlo, sobre un tablero de contrachapado (en mi caso blanco) dibujamos la forma frontal. La cual cortaremos y uniremos de la misma manera que las piezas que habíamos hecho anteriormente. Para cubrir los tornillos se usa un emplaste, que lijaremos una vez seco. Al igual que los bordes y remates que nos queden en las maderas.
Hay que cubrir todas las ramas y detalles de la misma manera que hemos hecho hasta ahora.
Se aplica una imprimación selladora para que la pintura que demos posteriormente se fije correctamente. Tras esto damos 2 manos de la pintura acrílica que más nos guste, respetando los tiempos de secado entre manos.
Por último, en la parte posterior unimos unas pletinas para poder colgar nuestra obra de la pared.
Las playas colgantes que hicimos quedan genial con este trabajo.
Sé que estáis deseando tener uno en vuestra casa, así que ya sabéis, poned manos a la obra.
Abrazos jurricheros!
La entrada se publicó primero en Jurricheando.
Fuente: este post proviene de Jurricheando, donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Creado:
