En Facilisimo siempre alentamos a los bricolegas a recoger los enseres abandonados, ya que son la opción más ahorrativa para decorar la casa, amueblar habitaciones... y ejercitarse en las técnicas más diversas. Nuestra amiga Pecapf nos brinda una excelente demostración con esta lámpara que encontró en un contenedor y ha convertido en precioso adorno de su dormitorio con un esmerado tuneo.
"Me la encontré un día tirada en el contenedor, y pensé qué bonita estaría en mi cuarto con algunos retoques", cuenta la artista. Tuvo la suerte de que las delicadas pantallas no se abollaran en tan rudo alojamiento. Luego de algunas habilidades, y un poco de estilo que derrocha buen gusto, la lampara se convirtió en una hermoso objeto decorativo.
Una vez con la lámpara en su casa, nuestra amiga Pecapf no se hizo de rogar: "Ese mismo día empecé la sesión de mi tuneo particular. La limpié, le quité todo el polvo y la dejé lista para empezar a trabajar".
Antes de pintar la parte metálica había que retirar las pantallas, desenroscando los casquillos de las bombillas. La misma imprimación adherente sirve como color definitivo cuando queremos pintar de blanco, color elegido por Pecapf.
Luego de dejarla secar se procedió a la renovación de las pantallas
La pantalla original sirvió como base para la nueva tela elegida por nuestra amiga. La cola de carpintero es un eficaz recurso para pegar tejido sobre tejido.
Aquí vemos el acertado cambio conseguido por la artista en las pantallas. El brazo de metal ya ha secado, y puede abordarse el montaje de todos los elementos.
¡Lo que daría la persona que tiró la lámpara por poder recuperarla ahora!
Y aquí vemos la preciosa lámpara colgada ya en el dormitorio de la artista. Nuestra amiga está justamente orgullosa de su primer tuneo, y, ante las numerosas felicitaciones de los foreros, contestaba con gracia: "Sí que parece nueva, es que la compré en Don Contenedor".
¿Que les parece? ¿Hubiesen hecho algo parecido de haber encontrado la lampara?