Compramos una casa en un pequeño pueblo de Guadalajara. Decidimos reformarla para convertirla en nuestro hogar.
Nuestra previsión inicial era de finalizar la reforma en un par de años; con esto ya debería estar acabada. Poco a poco (o más bien mucho a mucho) han ido surgiendo nuevas ideas que han ido haciendo que la reforma se prolongue, estoy segura de que todos conocéis las frases: "ya que estoy... cómo no voy a hacer esto... luego volver a hacer obra... una vez finalizada esto otro no lo voy a hacer...". Además de las propias ideas han surgido nuevos inconvenientes que han hecho que todo se vuelva más complicado, e incluso en muchísimas ocasiones desesperante.
He tomado la decisión de hacer un poco de terapia conmigo misma, buscando en parte un poco de apoyo y consuelo en estas líneas y dejar narrada nuestra aventura (porque en cierto modo, siento la necesidad de dejar constancia por escrito, con penas y alegrías incluidas).
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Modificado: