Hola, como ya sabéis aquí mi señor novio me trajo hace unas semanas una caja llena de tablones de pallets, ya que son las sobras de su trabajo y le dejan que me las traiga. Por lo que claro, mi imaginación empieza a volar. Hace mucho que quería encontrar un taburete y restaurarlo, pero como no encontraba ninguno, mirando los tablones de madera se me ocurrió que podía hacer uno.
Es muy sencillo de hacer, en una sola tarde se hace. Sí que es verdad que al ser un tablón tan finito solo sirve para decoración. Como por ejemplo para dejar una pila de revistas, una planta, apilar mantas, colocar una cesta encima como lo he hecho yo, para lo que se os ocurra.
Lo primero que tenemos que hacer es saber las medidas que queramos para nuestro taburete. Una vez sepamos como de ancho y alto lo queramos, solo tenemos que cortar cada listón y lijarlo para eliminar las posibles astillas.
Para el asiento podemos colocar un tablero, pero en mi caso es una agrupación de listones que irán por la parte inferior unidos con unos listones con el tamaño de la separación de las patas. De estos debemos cortar cuatro, dos para el asiento y otros dos para mitad altura de las patas.
Luego cortaremos las patas con una pequeña angulación. La angulación dependerá de como inclinadas queramos las patas. En la imagen veréis como se tienen que cortar los ángulos, ya que los de la parte inferior van hacia el lado contrario que los superiores.
Cuando ya tenemos cortadas las patas, las uniremos con uno de los tablones pequeños que hemos cortado, en la parte media de estas. Todas las uniones las haremos con cola para madera y clavos, para reforzar. Pero podéis usar la forma de unión que mas os guste.
Ya montadas las dos patas, nos tocara unirlas a la base. Aquí clavaremos por los laterales de las patas a los listones de nuestra base.
Una vez montada toda la estructura, cortaremos un listón con la misma angulación que hemos cortado en las patas y la distancia que hay entre estas. Y lo uniremos en la parte media de los listones que unen las patas.
Daremos una segunda lijada para que quede perfecta y redondearemos las esquinas y bordes.
Ya solo nos queda poner el color que más nos guste. Como sabéis soy una apasionada de la madera envejecida y queda preciosa al contrastar con mis otros muebles y paredes blancos y con la luminosidad que tiene este piso. Para esto solo necesitamos un poco de aguarrás, betún de Judea y un trapo para retirar el exceso. Para proteger el mueble podemos añadir cera incolora al final o antes de añadir el betún barniz incoloro.
Espero que os haya gustado, y si lo recreáis por favor mandarme fotos porque me encanta verlas.
Bss