Quería mostraros el resultado, ya que imágenes del proceso no tengo. Lo fabriqué hace años ya (igual 6 o 7), en un tiempo que ni siquiera me rondaba la idea de tener un blog. Así que lo contaré tan claramente que no os harán falta ni fotos.
Y viene de una época en la que junto con mis amigos, decidimos recuperar este vicio de la adolescencia. Bien porque se volvieron a poner de moda estas cosas (gracias Big Bang Theory), bien porque es un ocio económico. Algo que se agradece cuando empiezas a tener responsabilidades como comprar una vivienda por ejemplo.
Materiales
Tablero contrachapado 1 cm de grosor
Fieltro
Cola carpintero
Papel de periódico, cocina o higiénico.
Pintura acrílica
Pasos para construir un dadódromo
Empezamos dibujando un hexágono sobre el tablero de madera con el tamaño que necesitemos. Dibujar un hexágono es bastante fácil. Supongo que lo recordáis del colegio, pero para quien se saltara la clase, pongo un enlace que ilustra cómo hacerlo:
Wikipedia. Hehágono
Jurriconsejo: Una opción rápida es buscar o crear una imagen de un hexágono, imprimir y trasladar al tablero.
El complemento perfecto para tirar los dados
Una vez el hexágono está dibujado en el tablero con nuestras medidas, toca recortarlo con una sierra para madera. Si usáis sierra para marquetería mejor, la madera es fina y con la de sierra de calar puede acabar rompiéndose.
Tomamos la medida de uno de los lados del hexágono, que usaremos para dibujar un rectángulo en el tablero. El alto será el que creamos necesario para que nuestros dados nos se escapen del dadódromo. Así hacemos para conseguir 6 rectángulos iguales, que recortaremos usando el mismo procedimiento que para el hexágono.
Aprovechamos que tenemos cortadas las piezas para usarlas de plantilla en el fieltro. Así recortamos piezas iguales tanto de los rectángulos como del hexágono en éste material.
Usando cola blanca para madera unimos cada uno de los rectángulos al hexágono, formando así las paredes. Dejamos secar.
Unir las partes
También con cola pegamos las piezas de fieltro en el interior. Empezamos por la base hexagonal. Seguramente tengáis que recortar el fieltro para que encaje en la base, ya que nos comimos espacio poniendo las paredes.
Igualmente hacemos lo mismo forrando con fieltro las paredes interiores. Y para la parte superior del dadódromo recortar y pegar unas tiras de fieltro de unos 2 o 3 cm de largo y con un ángulo de 60º.
Ahora es cuando viene lo divertido
Para los que ya vamos teniendo una edad, seguro que la mayoría recordaréis con nostalgia el programa de Art Attack, donde un chaval llamado Jordi Cruz nos enseñaba a hacer manualidades con materiales corrientes. Por cierto, este chaval sigue vivo, el mito de que murió no es verdad, jajaja. Y además apenas ha cambiado desde que hacía el programa unos 20 años atrás (como podéis comprobar en su canal de Youtube: Ver ). Gracias a un poco de este programa y un poco de bricomanía, se puede decir que he acabado haciendo un blog como este.
El complemento perfecto para tirar los dados
Pues en el programa, una de las cosas más típicas era el “Mejunje Art Attack” y que nosotros vamos a usar para decorar el exterior de nuestro dadódromo. El mejunje se obtiene mezclando en un recipiente cola y agua a partes iguales, es decir, si usamos 50ml de cola, también usaremos 50ml de agua.
Aplicar mejunje
Vamos aplicando el mejunje con un pincel en las paredes exteriores, y a la vez vamos pegando papel. Lo mejor es que el papel esté cortado en pequeños trozos manejables, no pasa nada porque sean irregulares o en tiras, mejor todavía, así nos quedará una textura irregular que hace un efecto muy chulo. Con el mismo mejunje y pincel lo vamos aplicando también sobre el papel que hemos puesto. Haremos tantas capas como queramos hasta dejar la textura que más nos guste en las paredes exteriores y dejamos secar.
Ahora toca pintar los laterales. En mi caso usé una base oscura sobre la que apliqué otra posterior clara para crear el efecto que veis, pero aquí cada uno puede usar los colores que más le gusten.
Si queréis, y como detalle final, podéis pegar otro hexágono de fieltro en la parte inferior.
Y hasta aquí el proceso. Espero que os haya gustado y si sois asiduos de juegos de mesa os atreváis a hacerlo, y si no lo sois ya estáis tardando en serlo. En mi grupo de amigos antes jugábamos muy a menudo, ahora penas, pero aprovechamos cualquier cena o comida que nos reunimos para echar alguna partidita. Igualmente recomendable para entretener a niños y separarlos de las tablet. A veces oigo que los niños de ahora se pasan el día entero con el móvil o la tablet, yo opino que es que no sabemos darles alternativas de calidad, y esta es una de ellas. En mi caso, algunas veces que estoy con mis sobrinos les saco juegos de mesa y se lo pasan teta… y yo más aún.
Hasta el próximo jurricheo. Un abrazote!!
El complemento perfecto para tirar los dados