El estilo 'chill out' es un espacio acogedor con palet, está de moda, genera espacios consagrados al relax, en un estilo diáfano y sin ostentaciones, de inspiración oriental. Un ambiente chill out que ha conocido éxito fulminante es el rincón de exterior con asientos cómodos, de baja altura, para gozar de las sensaciones al aire libre y la cercanía de las plantas.
Tener un espacio acogedor con palets ofrecen magníficas cualidades para servir de robusto armazón a dichos asientos, brindando un toque natural muy apropiado en terrazas, áticos, porches y jardines. Dado que a menudo los palets salen gratis, añaden a sus virtudes el factor económico. Nuestra lectora Kroketten nos explica paso a paso cómo hizo su encantador rincón chill out en la terraza con palets.
Nuestra amiga Kroketten quería asegurarse de tener un espacio acogedor con palet. Por ello, en vez de recogerlos ya usados decidió utilizar palets nuevos, y adquirió cuatro de tipo europeo. La artista señala que conviene elegir los de primera categoría.
Después de unirlos en vertical con varias pletinas metálicas, los pintó con esmalte para exteriores.
La planta colocada en el ángulo tendrá luego una jardinera que ocupará todo el rincón.
Mientras seca la pintura, nuestra amiga confecciona los asientos. Los materiales que empleará son dos tableros de 5 mm, gomaespuma y tela. Tras recortar las planchas de gomaespuma, las cubre tensando bien y grapa la tela a las tablas que van pegadas a la pared.
"Quien tenga maña puede hacer fundas con cremalleras para poder lavarlas", sugiere Kroketten.
¡Siguiente paso completado! Esto marcha perfectamente.
La tela blanca y la madera pintada de marrón oscuro entablan un contraste muy atractivo.
"Ahora pasamos a rellenar el hueco de la esquina. Como no es cuadrado, compramos una lona permeable que enganchamos a la pared y a los palets con unas tiras de madera y unos tornillos (con sus correspondientes tacos). Plantamos la planta elegida, y esparcimos arena o piedras blancas en la superficie".
"Ya sólo falta coger unas plantitas, hacer unas macetas con maderas recicladas (¡aquí economizamos en todo!), y poner los asientos y varios cojines en su sitio", concluye la artista.
Y aquí tenemos el encantador rincón chill out de nuestra amiga Kroketten, dispuesto a convertirse en el refugio predilecto de la familia en los buenos ratos de la primavera. ¡Felicidades!