El agua de la red general puede llevar gran cantidad de impurezas de distintos tamaños que provocan muchos problemas. Estos problemas se traducen en atascos en las tuberías, averías en los electrodomésticos, malos olores, malos sabores (a cloro, por ejemplo), etc. La colocación de un depurador de agua doméstico soluciona la mayor parte de ellos.
Debes saber
Tienen que instalarse en la red de agua fría, ya que no existen depuradores domésticos para agua caliente. Si se trata de un descalcificador que previene la acumulación de cal en los electrodomésticos, debe situarse entre el grifo y el aparato.
En el caso de los calentadores, el depurador debe estar entre la llave de paso y el tubo de entrada de agua.
Tipos de depuradores
Dependiendo de los sedimentos que se quieran eliminar, existen varias clases de depuradores: los que van acoplados directamente al grifo, que generalmente son conocidos como filtros (y no como depuradores), y los de sobremesa o colgados (que van conectados al grifo a través de una manguera). Las principales diferencias entre ambos son el tamaño y la capacidad del filtro. Por otro lado están los descalcificadores, que pueden colgarse en la pared o apoyarse en el suelo; se ubican intercalados en la instalación y pueden asimismo trabajar con la presión normal del agua.
Elementos determinantes
- Impurezas provocadas por sedimentos de la propia tubería, y que se almacenan en determinadas zonas de ésta.
- La composición del agua. Es posible que el agua posea, entre otros componentes, demasiada cal. En este caso, electrodomésticos como lavadoras, lavaplatos o calentadores son los que saldrán perdiendo. En los calentadores, por ejemplo, la alta temperatura del agua y su estancamiento en el depósito del calentador, provocan gran destilación de la cal, llegando a tapar las tuberías interiores.
- Pequeños elementos que arrastra el agua, tales como arenilla, que se van posando en la tubería y que enturbian el agua.