Entre los diferentes métodos que existen para transferir imágenes sobre madera, el que te muestro hoy es sin duda uno de los más rápidos y sencillos. No te pierdas este paso a paso para aprender cómo hacerlo.
La transferencia de imágenes es una técnica para decorar y personalizar objetos, accesorios, muebles, etc. Básicamente consiste en pasar una imagen de una fotocopia a un soporte de madera, vidrio, cerámica, tejido, etc. Las formas más habituales de realizar un transfer sobre madera son:
Aplicando un gel medium o “foto transfer” sobre la fotocopia y eliminando la celulosa del papel humedeciéndola y frotando.
Utilizando un marcador para disolver el tóner de la impresión y transferirlo sobre la superficie.
Con ambos métodos se obtiene un buen resultado, pero sin duda con el segundo la transferencia se realiza de una forma mucho más rápida y fácil, tal y como vas a poder comprobar a continuación.
Materiales para transferir imágenes sobre madera
Una fotocopia de la imagen. Puede ser en blanco y negro o en color, pero lo principal es que sea una fotocopia o impresión con tinta de tóner.
Marcador Original Transfer. Este marcador contiene un liquido especial que disuelve el tóner.
Espátula para alisar y fijar la tinta sobre el soporte. Junto con el marcador se incorpora este accesorio.
Cinta adhesiva o de carrocero para fijar la imagen y evitar que se mueva.
Transferir imágenes paso a paso
Siguiendo estos pasos y consejos conseguirás transferir una imagen sobre madera en tan solo unos minutos.
Optimizar la imagen
Si la imagen que deseamos transferir es en color, en primer lugar habrá que aumentar su saturación. Hay que tener en cuenta que con la transferencia siempre se obtienen colores ligeramente más suaves. Por este motivo, habrá que “subirle los colores” para mejorar la transferencia.
Para ello, existen diferentes programas y aplicaciones online gratuitas como Microsoft Word, Fotor o Canva.
Preparar el soporte
Si la madera está barnizada, conviene lijar previamente la superficie con una lija de grano fino. De esta forma se consigue aumentar la porosidad y que se absorba rápidamente el líquido que desprende el marcador.
Por otra parte, este marcador también se puede utilizar sobre otros materiales como tejido, papel, cerámica, melamina, etc. Además, he obtenido un buen resultado sobre superficies pintadas con resinas acrílicas.
Fijar la fotocopia y marcar
A continuación, se coloca la imagen en contacto con la superficie a transferir y se fija con cinta adhesiva o de pintor. Resulta recomendable colocar la cinta únicamente en un lateral, ya que de esta forma se puede levantar fácilmente la imagen para ver si se ha transferido correctamente.
Seguidamente, hay que pasar el marcador por el reverso de la fotocopia, como si estuviéramos pintando. Para ahorrar producto, es suficiente con pasarlo una única vez.
Frotar con la espátula
Después del paso anterior, la imagen todavía no se habrá transferido. Para ello, hay que frotar con la espátula sobre todo el dibujo.
Se ha de ejercer una presión firme pero con cuidado de no rasgar el papel. Al terminar se puede levantar una esquina para comprobar si la imagen se ha transferido correctamente. En caso contrario, se insistirá nuevamente con la espátula.
En el siguiente vídeo tutorial podrás ver todo el paso a paso detallado:
¿Has probado alguna vez a transferir imágenes sobre madera o cualquier otro soporte? ¿Conocías este método utilizando el marcador Original Transfer? Como habrás podido comprobar, con él se pueden realizar transfers de una forma rápida y sencilla.
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