Una de estas propiedades es la capacidad de ablandarse bajo ciertas condiciones, lo que permite despegar la cola de carpintero, en caso de reparaciones, restauraciones o si es necesario desarmar el mueble para moverlo. Por ello, dependiendo del tipo de pegamento utilizado, así como su potencia adhesiva, existen ciertos métodos a tener en cuenta al momento de despegar este material, los cuales suelen ser efectivos igualmente efectivos para retirar los excesos del mismo, o limpiar la cola derramada.
SI es cola de carpintero de baja fijación, como la utilizada en muebles pequeños, esta tiene la propiedad de ser soluble al agua, por lo que la mejor forma de retirarla es mojando la superficie con agua caliente, varias veces para que el adhesivo absorba el líquido, y luego forzar un poco las piezas hasta despegarlas. Si por el contrario, nos encontramos con adherentes con mayor concentración de polivinilo y, por ende más resistentes, es necesario aplicar calor al material con un secador de cabello o una pistola de calor para debilitarlo.
Por último, cómo despegar la cola de carpintero con adherentes más fuertes, como: pegamento de contacto, es necesario usar disolventes o aplicar acetona para reducir su resistencia y despegarlos. SI deseas retirar los restos de cola de la madera, para dejar la superficie limpia del material, o si te encuentras con restos ya secos de cola derramada, una vez blandos con el método correcto, habrá que lijar la superficie, con lija de grano suave, hasta que no quede ni rastro del adhesivo.