Antes de ofrecerte algunos consejos, déjanos ponerte en contexto: según la Asociación de fabricantes de materiales aislantes en España, más de la mitad de los edificios residenciales son anteriores a 1979, esto quiere decir que no se construyeron con criterios de aislamiento térmico. Una pésima noticia a la que vamos a hacer frente en este artículo.
Fuente: DavidHellman/Unsplash
Protocolo STOP fuga de calor en casa:
- Revisa todas las habitaciones y espacios de tu hogar, prestando especial atención a puertas y ventanas. Utiliza burletes y otros accesorios disponibles para sellar y aislar estos principales focos de entrada de frío.
- Ventila en momentos en los que sepas que el confort de los habitantes de la casa no va a verse comprometido, cierra pasados unos minutos y asegúrate de que no queda ninguna ranura abierta por donde se cuele el aire.
- Deja libre los radiadores. Elimina muebles y trabas.
- Las paredes que dan al exterior son las más frías. Si son de mala calidad, se pierde la calefacción por ahí sin darnos cuenta. No dudes en llenarlas de 'cosas' para favorecer que se mantenga el calor: estanterías, cortinas, muebles...
- El forro térmico en las cortinas es una buena opción para crear una doble capa en las paredes exteriores.
- Recuerda algo: el cuerpo humano puede ser una fuga de calor en sí mismo. Si no te abrigas, si no ingieres bebidas calientes y algo tan absurdo aparentemente como no secarte el cabello en invierno, puede volverse en tu contra y hacer que adquieras una desafortunada gripe.
- Las tuberías, especialmente en baños y cocinas, constituyen otra fuga que no solemos tener en cuenta. No dudes en llamar a un especialista para que las revise y aísle adecuadamente.
Especial atención a las ventanas
Se dice que entre un 15% y un 30% del calor calor de una casa se escapa por unas ventanas mal aisladas. Revisa todas ellas y trata de poner remedio a las más deterioradas y deficientes. Las persianas romanas son una opción elegante y económica, no dudes en valorar cuáles decorarían mejor tu salón: los tonos crudos y claros son perfectos para todo tipo de estilos y además permiten que entre el sol y, por consiguiente, caliente en las horas centrales del día, ¡tenlo en cuenta!
Cubre cercos y grietas, por pequeñas que sean. Haz uso de las llamadas 'películas para ventanas', un recubrimiento fácil, elegante y económico que hará de segunda capa evitando que entre el frío o al menos, que no entre tan fácilmente.
¡Esperamos que con estos consejos, pongas fin a las fugas de calor en tu hogar o al menos luches activamente contra ellas! Te esperamos en el blog de Vivienda Saludable.