La imagen de marca de una empresa y de una tienda en este caso pasa por la entrada. Éste debe estar inmaculada con un cristal perfectamente limpio que revele los últimos productos propuestos pero también un espacio de exposición si se trata de una empresa de servicios.
Un escaparate equipado con cristal laminado
Pero, ¿qué es un vidrio laminado y para qué sirve? Un vidrio resistente que no se rompe en múltiples piezas al menor impacto, sino que sólo se agrieta. Este vidrio templado se utiliza en escaparates que hoy en día deben estar equipados con este tipo de cristal.
Este mismo vidrio es sometido a un tratamiento térmico y resulta hasta 5 veces más resistente que el vidrio tradicional. También se utiliza para la fabricación de determinados dobles acristalamientos. El cristalero utiliza regularmente este tipo de vidrio para sustituir el doble acristalamiento. Sin embargo, sigue siendo menos utilizado que el vidrio laminado, que es mucho más popular en la industria del vidrio en particular.
¿Qué es el vidrio laminado?
Este tipo de vidrio consiste en el ensamblaje de 2 láminas pegadas entre sí mediante un film sintético ultra resistente. Cuando se producen residuos de vidrio, se adhieren al material adhesivo y no se rompen en múltiples piezas peligrosas. Incluso roto, este vidrio no deja pasar el aire frío y permanece en su sitio hasta que el vidriero interviene.
Algunas casas también están equipadas con cristales antirrobo para retrasar a los posibles ladrones. En efecto, este tipo de vidrio puede resistir los golpes de maza, martillo y hacha gracias a las 2 hojas de vidrio muy resistentes.
¿Qué pasa con el aislamiento acústico?
Los acristalamientos instalados por los Cristaleros también deben cumplir con las normas acústicas modernas. Estos vidrios están hechos de vidrio laminado de calidad y deben absorber el ruido ambiental para asegurar un aislamiento acústico ideal al final. De este modo, la película de PVB absorbe el ruido y las vibraciones sonoras. Este tipo de vidrio es ideal para ser instalado en nuevas construcciones que deben respetar las normas de aislamiento acústico en particular.
Y qué pasa con los espacios abiertos
Si tu negocio es una tienda y está en un lugar de transito quizás te interese contar con un escaparate abierto, para fomentar la entrada libre de los potenciales clientes. Para ello es fundamental la mano de un buen cristalero que sea capaz de montar un escaparate fácil de aperturar y cerrar para que tu negocio esté protegido cuando no esté abierto pero deje ver correctamente tu mercancia. Si cuentas con un espacio abierto, no te olvides también de lo que te puede ayudar el marketing olfativo.