Conocemos bien la forma sencilla de fortalecer las uniones en ángulo, al realizar todo tipo de montajes con madera. Esos serviciales palitos estriados llamados espigas o tubillones se convierten en férreos lazos que cohesionan ambas maderas, pero un aliado que tenemos en casa siempre son los palo de pinchitos o pinchos de madera que también nos sirven para juntar maderas de pequeñas dimensiones
Pero en muchos casos necesitamos espigas muy finas, para un marquito, o una caja pequeña, y las del número 6, incluso del 4, son demasiado gruesas para el grosor de la tabla. ¿Qué hacemos entonces? Muy sencillo: recurrir a un palo de pinchitos
Una vez practicado el agujero (1), rayamos con una sierra el palo de pinchitos para que tenga estrías (2), lo embutimos untado de cola o resina epoxi (3), y finalmente cortamos y lijamos (4).
¡Listo! Hemos robustecido de manera considerable el pequeño marco, si hacéis un ensayo de fuerza hasta la rotura os sorprenderá la eficacia de estos diminutos aliados.
¿Has utilizado alguna vez palos de pinchitos en un trabajo de carpinería?