Según la revista Eroski Consumer la reforma completa de un baño que incluya cambio de revestimientos, sanitarios, tuberías, pintura y acabados, puede rondar los 6.000 euros. Si la reforma es parcial y únicamente vamos a renovar el mobiliario, revestimientos, sanitarios y grifería, este presupuesto se puede reducir considerablemente.
No hace mucho que reformamos uno de los baños de casa y próximamente reformaremos el otro, así que voy a daros algunos consejos para que no se dispare el presupuesto basados en nuestra propia experiencia.
Planificación
Antes de iniciar una reforma es esencial que tengamos claro de qué presupuesto disponemos y que además seamos realistas, no se puede hacer una reforma completa de un baño con un presupuesto ajustado y pretender que tenga lo último en diseño.
También es recomendable que destinemos una parte de nuestro presupuesto a imprevistos ya que a veces nos encontramos con sorpresas de última hora que hacen que el gasto sea mayor del esperado.
Busca personal cualificado
Si realmente quieres estirar el presupuesto de reforma de tu baño contrata un buen profesional, no solo te ahorrará disgustos sino que además te aconsejará con todo lo relacionado con la obra. Pregunta a conocidos, amigos, familia, compañeros de trabajo, boca a boca o pregunta en foros de bricolaje.
Solicita varios presupuestos, la clave no está solo en escoger al más barato o al más caro, sino al que realmente se compromete con su trabajo y responde en caso de que surja algún problema posterior a la reforma, en definitiva, como se suele decir, la mejor relación calidad/precio.
Encárgate de la compra de los materiales
Nos podemos ahorrar una cantidad considerable de dinero si somos nosotros mismos los que nos hacemos cargo de la compra de los materiales. También podemos ahorrar horas de mano de obra si los tenemos preparados en la vivienda para cuando lleguen los profesionales.
En cuestión de materiales hay que aplicar aquello de “busca y compara“, ten en cuenta que no por ser más caro tiene necesariamente que ser mejor, ni tampoco es conveniente irse a lo más barato ya que ya sabemos que al final puede salir caro.
Si vas a renovar revestimiento y suelo, conviene que elijas modelos que no pasen de moda fácilmente y que sean de cierta calidad ya que su colocación es costosa y requiere hacer obras, por lo que no resulta económico estar cambiándolo cada pocos años.
También conviene valorar si es necesario colocar revestimiento cerámico en todas las paredes. Si el baño tiene buena ventilación o es un aseo sin ducha o bañera, puedes ahorrar bastante dinero pintando las paredes con pintura especial para zonas húmedas o con papel para cocinas y baños.
En la grifería busca una buena relación calidad/precio ya que es algo que puedes renovar sin que requiera demasiado coste de mano de obra, incluso lo puedes hacer tú mismo si eres un poco manitas.
En cuanto al sanitario, sé práctico. Está claro que existen piezas con un diseño muy elegante (y elevado precio) pero que a veces no resultan todo lo prácticas que debieran o utilizan materiales delicados que requieren ciertos cuidados. Por ello, ante todo, piensa qué material se va a ajustar más al uso del baño (intensivo, familiar, de cortesía…) y valora si realmente merece la pena gastar más por una bañera de hidromasaje, por ejemplo.
Respecto al mobiliario y decoración, al igual que el sanitario, no creo que merezca la pena pagar más por el diseño ya que es un elemento que se puede renovar fácilmente. Con ello no quiero decir que compremos mobiliario de mala calidad que haya que cambiar a los cuatro días de colocarlo, pero existe una amplia gama de productos de buena calidad con un precio muy competitivo.
Por último, aprovecha las rebajas o los outlets para conseguir lo mismo a un precio más económico, quien sabe, siempre puedes encontrar alguna ganga.
DIY
¡Hazlo tú mismo! Pero conociendo tus limitaciones, no te pongas a alicatar el baño si nunca lo has hecho, puede salir bien pero tienes muchas probabilidades de que salga mal. Sin embargo lo que si que puedes hacer es, por ejemplo, tunear el antiguo mobiliario, o pintar las paredes, o hacer tú mismo un mueble para el lavabo… En definitiva, todo lo que creas que puedas hacer será dinero que te ahorrarás del presupuesto de reforma.
Resumiendo…
En definitiva, para que no se dispare el precio final de la reforma del baño debemos recortar en:
Sanitario, grifería, mobiliario, decoración… no es cuestión de comprar lo más barato pero podemos encontrar materiales de calidad comparando precios y aprovechando liquidaciones, outlets y rebajas.
Tuneando, restaurando y reciclando elementos que podamos reutilizar e incorporar al baño.
Por otra parte, debemos invertir la mayor parte de nuestro presupuesto en:
Un buen equipo de profesionales que realicen un buen trabajo y cumplan con los plazos de entrega.
Revestimientos y suelos de calidad que duren muchos años como el primer día.