Como ya sabéis, el craquelado es una de las técnicas que más se emplean en la decoración y restauración de muebles. Craquelar consiste en reproducir las grietas que, con el paso del tiempo, van surgiendo de madera natural en los muebles de madera. Con este acabado, conseguiremos dar a nuestros trabajos un aspecto rústico y antiguo que a muchos nos encanta.
Así, existen muchas formas de craquelar, en función de las cuales obtendremos un tipo de grieta u otro. Por ello, hoy quiero compartir con vosotros este vídeo que he encontrado en la red, y que explica perfectamente tres formas distintas de conseguirlo.
Los pasos iniciales son comunes en las tres técnicas. La primera fase consiste en aplicar una imprimación, para preparar la madera y facilitar la adherencia posterior. Para lo cual dependiendo del tipo de madera que sea tendremos que remover la pintura anterior o solamente lijar. Después, aplicaremos la imprimación tras lo cual pasaremos de nuevo la lija.
Cuando haya secado, tendremos la madera lista para pintar. Como lo que vamos a realizar es un craquelado, lo primero va a ser aplicar dos capas de la pintura base. Después de que esto se haya secado podremos empezar con una de las técnicas para el craquelado.
1 Para craquelados grandes: Aplicamos una capa de craquelador, con un pincel de pelo suave, y secamos levemente, de manera que antes de que se haya secado por completo, aplicamos la pintura acrílica diluida en agua. En este caso, se ha extendido a partir de pinceladas cruzadas, de manera paralela, para no arrastrar el craquelador, para lo cual también se ha aplicado una sola capa. Luego de haber terminado solo debemos aplicar calor para que pueda secarse y así conseguiríamos las grietas gruesas.
2 Para craquelados más pequeños: Aplicamos de igual forma el craquelador y secamos levemente. En esta ocasión, la pintura la vamos a extender con una esponja húmeda, con la que vamos a ir cubriendo toda la superficie, variando las marcas que dejamos. No debemos seguir un movimiento fijo para aplicar la pintura con la esponja. Después secamos con el secador.
3 Para craquelados regulares: Aplicamos el craquelador y dejamos secar por completo. Con un pincel extendemos la pintura acrílica diluida en agua. Secamos y obtendremos un craquelado más regular, más lineal, que imita la madera de los árboles así como las típicas grietas que surgen en los muebles con el paso del tiempo.
¿Qué os parece? ¿Cómo craqueláis vosotros?