Vuelvo con muchas ganas de hacer y enseñaros cosas nuevas, de crear y crear, y aprender de vosotr@s también! Sé que me habré perdido cientos de proyectos y cosas bonitas vuestras, pero haré lo posible por ponerme al día aunque sea un poco por encima para hacerme a la idea!
Hoy os traigo un bastidor bordado, pero no bordado con puntadas, si no con abalorios.
Quería rellenar toda la tela del bastidor con abalorios hasta formar un degradado de color, pero al final no lo acabé rellenando del todo, creo que me habría vuelto loca!!
Empecé a rellenar con los abalorios de un solo tono, tranquiiiilamente y uno por uno. Desde luego se trata de un trabajo anti-estrés totalmente.
Después fui añadiendo el resto de colores, con pequeños toques de abalorios plateados y azul verdoso.
Y cuando la parte de abajo estaba completamente rellena hasta no ver la tela ya lo consideré acabado.
Se corta bien la tela sobrante dejando 1cm más o menos para poder doblar e ir pegándola por dentro con silicona caliente.
Me habría gustado hacer un par en dos colores distintos porque la idea me ha gustado como ha quedado, pero ya veré que hago con el otro bastidor que tengo. De momento me gusta como queda en mi rincón favorito del salón, al lado de ese espejo sol que hice el año pasado!
Un DIY que requiere paciencia pero bien fácil para quien le apetezca probar. Ya os digo yo que es súper relajante!!
Volveré pronto con un próximo DIY, lo prometo!
Fuente: este post proviene de En Miss Manos, donde puedes consultar el contenido original.
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