Lo primero que tenia que hacer era quitar el oxido, empecé con una rotaflex... pero habia demasiados recovecos, asi que decidi utilizar este producto que transforma el oxido en color negro.
Es muy facil de usa, lo echas en un recipiente de plástico, y con un pincel lo vas aplicando por toda la superficie. El producto en si es blanco, pero una vez aplicado se va poniendo poco a poco negro.
Una vez eliminado todo el oxido, se puede pintar por encima, como yo queria que fuesen negras no las pinté.
Cortamos un tablero a la medida que queramos y lo anclamos con tirafondos. Si sobresalen los cortamos.
Con no mas clavos pegamos unas baldosas, dejamos secar, y listo!
Una mesa para el jardin (o donde queramos), fácil, barata y muy bonita!