Los cambios de estación nos dan la excusa perfecta para renovar nuestra casa. De hecho, a medida que cambiamos nuestro armario, también podemos cambiar nuestro espacio de vida! Y así, en el otoño, con el frío, el paisaje que cambia de color y las horas de luz que se reducen … es el momento de pensar más en nuestra casa.
Y como he dicho antes, hoy le daremos un poco de inspiración a un lugar a menudo pasado por alto, pero muy útil para la organización: la lavandería.
En la imagen se presenta un espacio de “comprimido”, pero bien organizado. Es un espacio formado en una parte de la cocina,con una anchura de sólo 150 cm. A través de una planificación cuidadosa, este lugar se ha convertido en un espacio cómodo y bien organizado para el lavado y planchado de ropa aunque pueda ser pequeño.
Se ha aprovechado el espacio debajo de la ventana para fijar el fregadero, se ha creado una gran superficie de mesa y abajo se han colocando los cestos de ropa sucia y la lavadora.
Y como el espacio es tan reducido, todo se puede usar así que las paredes también las vamos a aprovechar. La pared lateral tiene un armario con una caja y puertas de cristal, que también dejan un espacio para la tabla de planchar.
Estantes útiles en la esquina, que de otro modo estarían infrautilizadas y que se esta forma nos permite tener cepillos, plancha y detergentes a mano.
Para elegir los colores mejor buscar tonos colores naturales y relajantes, algo como madera o leña clara.