Construir una casa con balas de paja

?Te imaginas que pudieras construir tu casa pagando sólo la quinta parte de lo que suele costar una vivienda, empleando un material plenamente ecológico, y encontrar después cada año una bajada en las facturas de aire acondicionado y calefacción? Estas cualidades milagrosas son las que ofrecen las balas de paja, un material ecológico, sumamente barato y de fácil manejo, que ha traído un chorro de aire fresco al mercado de casas ecológicas. 

 

Los fardos, pacas o balas de paja pueden conseguirse fácilmente en las zonas donde se cultive cereal (avena, cebada, trigo) o arroz, lo cual casi equivale a decir en cualquier sitio, dada la adaptación de los cereales a muchos climas y altitudes. La construcción de casas ecológicas con balas de paja no requiere herramientas caras ni personal especializado, y por ello muchos propietarios abordan con éxito la construcción de su casa, a menudo con la solícita ayuda de los vecinos que escogieron antes esa opción.


La paja es un excelente material de construcción para las casas ecológicas, que genera edificios asequibles, naturales y bellos, con un asombroso aislamiento térmico y acústico. El método fue desarrollado por los pioneros norteamericanos a finales del siglo XIX, para crear asentamientos en las fértiles llanuras de cereal, desprovistas de árboles y rocas. Las paredes construidas con fardos de paja tienen una bella textura, y recuerdan los viejos muros de las casas de campo, una grata sensación que se refuerza por la calidad del aire interior, debido a que los muros de paja transpiran mejor que los de cualquier otro material.
Son viviendas eficientes, de probada duración, y están al alcance de cualquiera, lo que las hace muy atractivas para personas con firmes principios ecológicos y gente joven autosuficiente.

Hay tres modalidades constructivas con balas de paja: el Nebraska, el portante y el canadiense. El método Nebraska es el método original, desarrollado por los pioneros en América. Los fardos hacen de muros de carga, soportan el peso de la cubierta reforzados por estacas verticales y un zuncho de coronación. Es el método más sencillo y más divertido, requiere pocos conocimientos previos. En la estructura portante, un armazón de madera, acero u hormigón confiere la debida solidez, y las balas de paja hacen de cerramientos, sin carga estructural. Requiere experiencia en carpintería, y más inversión que el Nebraska. A cambio ganamos flexibilidad en el diseño. El método canadiense consolida las balas de paja con pilares de mortero. Es un método muy laborioso y poco divertido, pero supera todos los requisitos de la exigente normativa canadiense. En cualquier caso, la casa de paja requiere unos cimientos, que habitualmente son del tipo perimetral.

Un espíritu muy juvenil campea en estas viviendas ecológicas, con frecuentes labores en equipo para ayudar a los nuevos vecinos. Es una experiencia que muchos propietarios comparan con la famosa escena del granero Amish, en la película Único testigo.

Esta casa sigue como vemos el método portante. La impecable y sólida estructura de madera forma un tejado a dos aguas asimétrico, y el cimiento perimetral se prolonga en un zócalo de termoarcilla, cuya función es alejar las balas de paja de las humedades del suelo y las salpicaduras de la lluvia.

Igual que en la construcción tradicional, las puertas y ventanas van insertas en un hueco del muro que se ampara y robustece con un marco de madera.

Muchas personas se muestran incrédulas respecto a la seguridad de una casa de paja ante el fuego. Sin embargo, estas casas ofrecen mucha garantía, debido a una sencilla razón: los tallos sueltos y secos arden fácilmente, pero un muro compactado no. Las casas de paja han superado todos los inflexibles requisitos de la normativa legal en Estados Unidos y Canadá.
Las paredes se cubren luego con un fino revoco, que ofrece la agradable textura propia de las antiguas casas de campo.

Actualmente existen unas 90 viviendas de este tipo en España, y, aunque no tenemos aún normativa específica, la situación cambiará, dado que otros países occidentales han elaborado reglamentos, y las construcciones de paja alcanzan óptimo nivel.

En Inglaterra hay casas construidas hace cinco siglos con una mezcla de arena, paja y arcilla, que hoy día siguen habitadas. La técnica con balas de paja se aprende en dos días de taller, todo el mundo puede participar en la construcción, incluyendo mujeres y niños. Con la boga de este material han surgido asociaciones y empresas especializadas, que ofrecen cursos básicos para que cualquier familia pueda construir su casa de paja. Y será todavía más agradable y más divertido con una pequeña ayuda de los amigos, como decía la canción.

Agradecimientos: Mónica Cebada, del Taller Karuna
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Creado:

Relacionado

Hola amigos! Es un tema que me fascina, naturalmente las chozas de paja se conocen desde el Paleolítico, pero lo que se plantea como alternativa factible a la construcción tradicional es emplear los fardos de paja, compactados por las máquinas cosechadoras El método fue desarrollado por los pioneros norteamericanos a finales del siglo XIX. Y por qué se les ocurrió emplear ese material de construc ...