IMÁGEN: Dmitry Dzhus/Flickr
La iluminación en el hogar es muy importante, es una de las cosas por las que más nos preocupamos al momento de irnos a vivir a una casa, además porque es una tarea útil, rápida y fácil de instalación.
Los focos halógenos son una opción muy utilizada porque da una luz uniforme y clara en lugares como pasillos, recibidores, cocinas y hasta hospitales donde es necesaria que la luz sea continua. Pero no importa dónde los instales, en cualquier lugar va a ser una buena opción.
Antes de empezar tu instalación debes saber de que manera quieres instalar tus focos halógenos, ya que existen dos maneras: empotrados y el otro es estar sujeto a un carril.
Si decides hacerlo empotrado debes saber que tienes que revisar si el lugar de la instalación para saber si cuentas con un falso techo para hacerlo, porque si no, te será más difícil de realizar, ya que tendrás que perforar la pared varias veces.
Para realizar está instalación es necesario:
- Un portalámparas.
- Un foco halógeno.
- Un transformador primario.
- Un taladro, con coronas intercambiables.
El primer paso que hay que realizar, una vez que verificaste que el lugar al que vas a hacer remodelación cuenta con un falso techo, es marcar la distancia deseada para los focos y enseguida, posicionando el taladro en la pared y apoyandote de tu brazo, empezar la perforación.
Cuando estén listas todas las perforaciones, se limpia el área y se prosigue a instalar el transformador y los focos halógenos. Antes de eso hay que colocar los cables al transformador, tanto los cables de salida al foco y los cables de la iluminación general del área.
Una vez instalados los cables generales, metes en el orificio del techo el transformador y solo dejas a la vista el que va conectado al foco, enseguida colocas sobre la perforación el portalámparas y finalmente conectas el foco al cable, para después atornillar al portalámparas.
Y es así como puedes conseguir tus propios focos halógenos
¿ Tú ya los tienes?
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