Y es que, aunque parezca una cosa a la que no es tan necesario prestar la debida atención, la verdad es que una alfombra mal ubicada que termine deslizándose puede incluso terminar generando una visita al hospital.
Ya que este accesorio de decoración bastante útil suele estar ubicado en espacios ya sea de acceso reducido o rodeados de otros elementos de gran tamaño, los cuales con un simple golpe pueden provocar heridas tanto leves como mucho más graves.
Algo que podría ser muy fácilmente evitado con la correcta disposición de la alfombra y el simple hecho de aplicar un truco adecuado para mantener la alfombra en su lugar sin importar cuantas veces le pasen por encima.
Lo mejor para prevenir que la alfombra de la entrada de tu hogar, el dormitorio o la estancia de tu casa termine deslizándose es colocar debajo de las alfombras algún elemento que contribuya a un mayor agarre.
Sistemas para impedir el deslizamiento
Para lograr mantener la alfombra en su sitio uno de los trucos más prácticos y efectivos es el hecho de que podemos utilizar una estera de plástico, de la que se usa para decorar el hogar, que proporcione una mayor fricción debajo de la alfombra, impidiendo su desplazamiento.
Tenemos que tener en cuenta que el plástico utilizado tiene una superficie rugosa, por lo que contribuye a una mayor adherencia de la alfombra cuando se presiona. Este tipo de estera suele tener pequeñas protuberancias o picos que impiden el movimiento de la alfombra.
En el mercado también podemos encontrar almohadillas de goma o caucho que ayudan a una mayor adherencia. Cuanto más fina sea mejor, más adherencia tendremos y menos riesgos de tropiezos.
A veces podemos utilizar una estera de vinilo, un material muy fino ideal para que las alfombras no resbalen.
Podemos utilizar la tan socorrida cinta de doble cara, la cual cuenta con adhesivo por los dos lados para unir por ejemplo la alfombra y el suelo. Si utilizamos esta cinta debemos tener en cuenta que lo más adecuado es colocarla a lo largo de todos los bordes de la alfombra para un mejor resultado.
Si el suelo es de madera tenemos que limpiarlo cada vez que cambiemos la cinta para que no se estropee. De hecho la cinta debe cambiarse cada cierto tiempo para que continúe siendo eficaz.
El velcro es un material que también podemos utilizar, ya que agarra la tela de la alfombra y la mantiene en su sitio. El lado del velcro con adhesivo se debe colocar sobre el suelo para que quede fijo.
Después colocaremos la alfombra encima y ya lo tenemos. El problema de este sistema, al igual que la cinta de doble cara, es que necesitan cambiarse cada cierto tiempo para que sea seguro.
Y no debemos olvidar que las tiras, al despegarlas, pueden causar pequeños desperfectos en la alfombra.