Materiales
- Lechada o boquilla ya
- Espátula o llana
- Cubo
- Agua
Pasos a seguir
1. Lo primero será preparar la lechada, para lo que seguiremos las indicaciones del fabricante. Así, en un cubo o barreño mezclaremos el agua con el producto, hasta que no quede ningún grumo. Después la dejaremos reposar el tiempo indicado.
2. Cuando tenga la textura adecuada, comenzaremos a aplicar la mezcla con una espátula o llana, asegurándonos que entre bien en las juntas y retirando el exceso.
3. Una vez transcurrido el tiempo que indica el fabricante en la etiquetado, limpiamos la superficie.
Consejos
- Si la mezcla se endurece mucho, no debemos optar por añadir agua, pues se volverá demasiado líquido y ya no podremos usarla.
- Para conseguir un resultado más profesional, podemos rascar con ayuda de un punzón la junta, para retirar la lechada anterior.
- Una vez seca la mezcla aplicada, limpiaremos los restos con una esponja.
- Para asegurar la nueva lechada y protegerla de la humedad, podemos aplicar encima un sellador.
- Antes de escoger una lechada para nuestro baño, asegurémonos de que sea antihongos y antihumedad.
Agradecimientos a Heidi, del blog Los marcianos llegaron.