Las diferentes partes de una cerradura
Antes de elegir entre un tipo de cerradura u otro, es importante familiarizarse un poco con ellas.Pestillo: es el encargado de mantener la puerta cerrada cuando no está echada la llave.
Nueca: es donde se encuentra la varilla con los lados rectos (cuadradillo), donde se inserta la manilla desde una de las caras de la puerta.
Hueco del cilindro o bombín: se suele comprar por separado dependiendo de las dimensiones de la cerradura y el grado de seguridad que se requiera. Han de ser de la misma anchura que la puerta y deben incluir la leva.
Escudo de seguridad: suele ser opcional. Es una pieza que se sitúa en el exterior de la puerta, rodeando el bombín ayudando a reforzar la seguridad al evitar la extracción del bombín.
Bocallave: Pieza decorativa que se coloca en el interior de la puerta sobre el cilindro.
Bulones de seguridad: según el tipo de cerradura llevará más o menos cierres.
Cerradero: es la parte de la cerradura que se fija al marco de la puerta y donde encaja el pestillo y los bulones.
Llaves: vienen incluidas con el cilindro, normalmente entre tres y cinco copias. Existen diferentes tipos, pueden ser de puntos, dientes o paletas. También existen llaves con diferentes tipos de seguridad como las incompiables, amaestrables, etc…
Elegir una cerradura: el tipo de puerta y el grado de seguridad
Antes de elegir una cerradura debes tener en cuenta ciertos aspectos como el tipo de puerta. ¿Es una puerta interior o exterior? ¿De qué material está hecha (aluminio, madera, vidrio, pvc…)También debes identificar si tu puerta es derecha o izquierda. Para ello solo tienes que ponerte frente a ella, si las bisagras están en el lado derecho, la cerradura será derecha, y si están en el lado izquierdo, la cerradura será izquierda. Otro factor importante a tener en cuenta es el grado de seguridad. Podemos optar por una seguridad básica, media o alta.
Los diferentes tipos de cerradura
Existen diferentes tipos de cerraduras, los cuales se dividen en dos categorías:Cerraduras de empotrar
Cerraduras de superficie
Elegir una cerradura de empotrar
Son cerraduras que van embutidas en el interior de la puerta y su cerradero en el lado interior del marco de la puerta. La mayoría de las cerraduras de empotrar son reversibles. Es decir, sirven para puertas que abren a la derecha y a la izquierda.Según el nivel de seguridad deseado, las cerraduras de empotrar pueden ser:
Solo con resbalón: al cerrar la puerta solo queda asegurada por el pestillo. Desde el interior se abre con manilla y desde el exterior se abre también con manilla, o bien con el giro de la llave. Hay que tener en cuenta que este tipo de cerraduras no son seguras.
Con resbalón y cierres: la mayoría de cerraduras para puertas de exterior son de este tipo. Además del resbalón que se acciona desde el interior con la manilla, incluyen uno o varios cierres que se accionan con el giro de la llave.
Con resbalón, cierre y seguro: en este caso, además de los elementos anteriores, se incluye un seguro que solo se puede abrir desde el interior, evitando de esta forma que si alguien se hace con la llave pueda abrir desde el exterior.
Mecanismo antipánico: algunos modelos se abren y cierran con llave desde el exterior. Por el interior se cierran con un botón de giro. Este mecanismo permite en caso de emergencia abrir con llave desde fuera ya que la mayoría de estas cerraduras no pueden ser abiertas desde el exterior si en el interior hay llaves puestas.
Elegir una cerraduras de superficie
Las cerraduras de superficie se instalan atornilladas en la cara interior de la puerta y su cerradero también va atornillado a la cara externa del marco. Existen diferentes tipos, pueden incluir cuadradillo y usar manilla para abrir el pestillo, o bien accionarlo mediante un gancho lateral.Las cerraduras de superficie pueden ser:
Simples: incluyen pestillo y un único cierre en forma de petaca que se suele accionar con el giro de la llave.
Multicierre: bajo el pestillo incluyen varios cierres en forma de bulones que se accionan girando la llave. Por lo general, pueden tener entre tres y cinco cierres en forma de bulones pero siempre salen del mismo punto de la cerradura y se alojan lateralmente en el cerradero. Esto supone un único punto de seguridad con varios cierres.
Multipunto: permiten varios puntos de cierre en distintos lugares de la puerta. Generalmente uno superior y otro inferior. Cierran en varios puntos de la puerta, generalmente arriba y abajo y en el lateral, con uno o varios cierres.
A la hora de elegir una cerradura de empotrar ten en cuenta que para cambiar una por otra sin alterar la puerta, hay que asegurarse de tomar bien las medidas del hueco y de que las distancias de los orificios para la manilla coincidan, así como el bombín en la chapa de la puerta. Si vas a elegir una cerradura de superficie, este tipo de cerraduras son perfectas en el caso de que tengas que cambiar una cerradura empotrada y no encuentres un modelo que encaje en el hueco. De esta forma, se evita alterar la puerta.
Cómo tomar las medidas de una cerradura
Antes de elegir una cerradura, debes tomar las medidas de tu vieja cerradura para sustituirla. Si es una cerradura de empotrar intenta elegir una de las mismas dimensiones. Si las medidas no coinciden y la puerta es de madera se puede ajustar el hueco rebajándolo o rellenándolo con masilla.En el caso de las cerraduras de empotrar debes medir:
La profundiad de la cerradura
Altura de la caja
Distancia del frente al centro del bombín
La distancia entre ejes del centro del cuadradillo al centro del bombín.
En el caso de las cerraduras de sobreponer las medias necesarias son:
Altura de la caja
Ancho de la caja
Profundidad de la caja
Distancia entre ejes del centro del cuadradillo al centro del bombín.
Distancia del frente de la caja al centro del bombín.