Pues resulta que hace ya dos veranos que las avispas decidieron anidar en mi tejado; mejor dicho, entre las tejas y el muro , que es de piedra, al construirlo quedó un pequeño agujero junto a una de las viguetas de madera que sujetan el alero del tejado.El problema, no es que estén allí, sino que desde esa ubicación hacen frecuentes excursiones al interior de la casa en cuanto pillan una ventana abierta y es que para darle más aliciente a la cosa, no son avispas normales sino "avispas tamaño familiar" algo así como unas dos veces y media o tres el tamaño habitual. Hasta ahora no han picado a nadie pero no quiero esperar a ver el resultado, porque con ese descomunal tamaño, seguro que si le pican a alguien en una mano, habrá que amputar a la altura del cuello (por lo menos) El problema radica en que se encuentra a unos 8 metros del suelo y aunque tengo una escalera doble, no puedo alcanzar al sitio donde están. Por tanto, he pensado atacarlas desde el interior, pero el segundo problema es que el último forjado que es de madera de cuarterones y tablas de madera machihembrada, no es visitable; es decir, no tiene acceso desde la planta inferior. Por ello, he pensado abrir un hueco entre dos cuarterones, cortando las tablas, pero para que no se note, lo haré con la sierra japonesa que deja un corte finísimo y desde la planta inferior una vez colocado de nuevo no se apreciará el corte