Lo que no era suficiente era el espacio donde ponerlos. Y así que por todas partes había autitos desparramados.
Había que buscar una solución...
Y como el propietario de los dichosos autos es un fanático, qué mejor que hacer un baúl "temático"!
La casualidad (o la causalidad?) puso en mi camino 3 neumáticos usados que alguien desechó junto al contenedor de basura.
De ellos sólo usé 2 porque los brazos del interesado son un poco cortos todavía...
Busqué una forma de integrarlo a la tarea que estaba haciendo ya que en definitiva él sería el destinatario de este trabajo. Juntos limpiamos los neumáticos, le sacamos la tierra y el polvo y los lavamos muy bien.
Cuando estuvieron secos pasamos a la sección pintura.
Aquí está manos a la obra! Le dimos 1 mano de esmalte sintético negro mate diluído con aguarrás al 50%.
La segunda mano fue con el esmalte sin diluir.
Los dejamos secar por 24 horas y pasamos al armado del baúl.
Hace tiempo rescaté del contenedor (vaya, qué casualidad!) unas puertas de ropero de madera compensada. "Para algo van a servir" recuerdo que pensé en ese momento. Medí el diámetro interior del neumático y le agregué 5 cm más de cada lado, eso me dio 48 cm.
Pasé esta medida al compensado y corté 2 círculos iguales, uno para el fondo y otro para la tapa.
No hay un compás tan grande para hacer esta circunferencia así que empleé la técnica del lápiz, la cuerda y el clavo. Se pone un clavo en el centro de la madera a cortar, se ata una cuerda con la medida del radio y se amarra un lápiz en el otro extremo de la cuerda. (El radio es la mitad del diámetro) Manteniendo el lápiz apoyado en la madera y perpendicular a la misma, se traza un circulo de la medida deseada.
Para cortar usé sierra caladora y hoja para madera.
A continuación, lijé los cantos de los círculos con una lija fina y toda la superficie. En uno de ellos tracé una línea que me serviría de guía para cortar la tapa del baúl.
La guía no está al medio del círculo sino hacia un costado para que la boca del baúl no sea tan chica. Los autos que van adentro son bastante grandes y hay que dejarles lugar para entrar!
Corté la tapa con la sierra caladora y luego pinté todas las piezas de negro con el mismo esmalte sintético mate.
Ahora a armar las piezas!
Lo primero fue colocar en la pieza del fondo 4 ruedas de metal para que sea más fácil mover el baúl. Una vez colocadas puse la madera sobre el primer neumático y con ayuda de un taladro y una mecha de 10 para madera atravesé ambas piezas para colocar los pernos de sujeción.
Estos pernos llevan arandela y rosca que quedan por dentro del neumático, hay que apretarlos con una llave cricket o con una pinza.
Para unir el segundo neumático marqué los puntos de sujeción en el primero y los pasé a una hoja de papel de diario u otro material lo suficientemente grande como para que cubra el diámetro de la rueda. Luego "calqué" los puntos del papel al segundo neumático e hice todos los agujeros con un taladro y mecha de 10. Puse el neumático de arriba haciendo coincidir las perforaciones y coloqué los pernos.
Ahora la tapa. Uní las dos piezas con bisagras y luego las sujeté con pernos al neumático superior.
Así queda el baúl terminado.
Ahora Iván tiene un lugar para guardar sus autos muy acorde a su afición. Y nosotros contentos porque ya no andan los cochecitos desparramados por todas partes!
Animarse, ese es el secreto!
Fuente: este post proviene de Las manos de Gaby, donde puedes consultar el contenido original.
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