En restauración existen conceptos y términos que son imprescindibles conocer bien si queremos recuperar nuestros muebles correctamente. Es muy común cuando nos iniciamos es este campo, confundir términos muy parecidos pero que son acciones totalmente diferentes.
Decapar, decapado y decapé, son tres técnicas muy usadas en restauración que nos pueden llevar a confusión. Por este motivo, hoy vamos a conocer en qué consisten cada una de ellas y cómo podemos aplicarlas en nuestros proyectos.
Decapar
Decapar consiste en eliminar el acabado que tiene un mueble u objeto. Es decir, dejar la madera, el metal o el material del que está hecho ese mueble u objeto al natural. Lo más habitual con la técnica de decapar es eliminar restos de pinturas o barnices para dejar la pieza en su estado inicial y aplicar nuevos acabados.
Existen diferentes formas para eliminar los barnices o pinturas de un mueble. Es importante conocer bien cuál es el acabado que tiene, pues de ello dependerá el resultado óptimo al decapar y no dañar la pieza.
Si el acabado es pintura o barniz industrial, lo más habitual es utilizar decapante químico. Los decapantes se aplican con brocha, después de un tiempo de actuación, la pintura o barniz se irá levantando, entonces retiramos con espátula o lana de acero.
Otra forma de decapar es utilizando una pistola de calor, que ablanda la pintura o el barniz y nos facilita bastante la retirada con la ayuda de la espátula.
Vía Hogarmanía
Por último, cuando tenemos poca cantidad de pintura o barnices muy gastados y apenas inexistentes, podemos ayudarnos de una lija manual o lijadora eléctrica. No debemos abusar del uso de la lijadora eléctrica, pues esta forma de decapar es muy agresiva. A veces nos encontramos con un mueble chapado y al lijar, podemos eliminar tanto el acabado, como la madera o chapa, pudiendo ocasionar graves daños.
Decapado
El decapado es una técnica decorativa que se aplica tanto en madera como en metal, e incluso en otros materiales: melaminas, mimbre, cristal o plástico. Es un acabado muy popular gracias al auge de la pintura Chalk Paint y el estilo decorativo Shabby Chic y Vintage.
Es una técnica muy fácil de realizar y con un gran efecto visual decorativo. El decapado nos permite conseguir efectos envejecidos en piezas completamente nuevas.
El decapado consiste en pintar muebles con uno o varios tonos en diferentes capas y con contrastes de color.
Con la ayuda de una lija iremos poco a poco lijando diferentes zonas para retirar la última capa de color hasta que aparezca la anterior capa de pintura o incluso la madera.
Se trata de conseguir un efecto lo más parecido a una pieza que se ha ido desgastando por el uso y el paso del tiempo de un modo natural. Como en todo estilo decorativo el tipo de desgastado es muy personal. Quizás, nos guste algo muy marcado y exagerado o, por el contrario, algo suave en bordes o zonas más delicadas.
Para que nos resulte mucho más fácil retirar la pintura en las zonas que queremos desgastar con la lija, podemos ayudarnos o bien de una vela o de cera. Una vez seca la primera capa de pintura, pasamos la vela o cera en aquellas zonas que nos gustaría desgastar. A continuación, aplicamos la segunda capa de pintura y dejamos secar. Al pasar la lija en las zonas que hemos aplicado la vela o cera la pintura saltará muy fácilmente pues no tiene la adherencia que en el resto.
Decapé
El decapé al igual que el decapado es otra técnica decorativa de acabado, pero con la diferencia de que solamente es aplicable en madera.
Para realizar un decapé en un mueble necesitamos un producto llamado Cerusa. Este producto también es conocido como "Blanco de España" o "Albayalde". La cerusa es un pigmento, concretamente carbonato básico de plomo. Suele utilizarse en pintura artística, es de color blanco y se usa para "blanquear" o dar un efecto blanquecino a la superficie donde se aplica.
La técnica del decapé consiste en aplicar una o varias capas de cerusa sobre la madera natural del mueble. Si queremos marcar más aún la veta en la madera podemos ayudarnos con un cepillo de acero antes de aplicar el producto. Antes de que la cerusa se haya secado, lo retiramos con ayuda de una bayeta húmeda o espátula. Este producto se incrusta en las vetas de la madera y nos permite ver una especie de blanqueado natural.
Para este tipo de acabado es muy importante elegir bien la madera, pues de ello dependerá en menor o mayor grado el resultado final. Es aconsejable elegir una madera de tono oscuro y con gran cantidad de veta para que el contraste sea más visible. Si por el contrario tenemos una madera de color muy claro podemos optar por teñirla en un tono más oscuro.
Espero que esta pequeña guía te haya servido de ayuda. Estoy segura que a partir de ahora tendrás muy claro los conceptos de decapar, decapado y decapé y serás capaz de reconocer cuál es cada uno de ellos.
Muchas gracias por tu visita
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