¡Bien se nota que el dueño de la casa tiene una empresa de maderas! Ese tejadillo protege la puerta contra las salpicaduras de la lluvia, y también naturalmente nos ofrece resguardo para abrir el paraguas al salir, o buscar las llaves al entrar.
¡Y qué diseño más atractivo! Imaginad la fachada monda y lironda sin un detalle tan señorial.
Vemos que la sólida estructura, bien arriostrada en el muro, es perfectamente capaz de sustentar la albañilería del tejadillo.
¿Alguien tiene plan de hacer una obra parecida en las vacaciones?