Ya sabemos confeccionar una funda de cuero para un cuchillo, y vamos a poner un poco de empeño en la tarea para conseguir la máxima calidad, gracias a una herramienta específica.
Observad el cinturón rojo que tiene el guarnicionero en la mesa. Al momento nos llamará la atención la regularidad de las puntadas, el secreto de un acabado profesional en cualquier artículo de piel.
Esto se consigue de la manera más sencilla: antes de coser, marcamos la línea con una ruedecilla dentada. ¡Así de simple! Vemos la herramienta a la izquierda, es parecida a un cortador de pizzas
Los picos de la rueda se clavarán en el borde a intervalos regulares, y ya sólo queda agrandar los agujeritos con un punzón si hace falta, antes de coser.
El utensilio, por cierto, es original del siglo XIX. Y en la parte trasera, que se desenrosca, lleva otras ruedecillas con diferentes números de puntas, para escoger en cada caso la más adecuada.
A más puntas en el mismo diámetro, más cerca quedarán los agujeros, y más elegante será el acabado
¿Os apetece intentar algún trabajillo con piel?
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