¿Has comprado una barra de cortina barata, y después de instalarla encuentras que favorece muy poco el ambiente? Hay una solución realmente fácil, al alcance de cualquier bricolega: esconder la barra con una bonita galería de madera. Del mismo modo también nos sería muy útil este trabajo si queremos cubrir agujeros de la barra anterior, algunas manchas e incluso arañazos ocasionados por el montaje de la barra.
La galería también puede interesarnos sólo por su función decorativa, sin necesidad de camuflar nada. Es el caso de nuestro amigo Mrl_86, que fabricó varias piezas para las ventanas de su casa, con el mismo diseño y diferentes medidas. ¡Acompáñanos a ver los detalles del proceso!
Nuestro amigo Mrl_86 empieza el trabajo seleccionando las maderas en su bien surtido taller de bricolaje, y decide emplear pino de 2 cm de grosor.
En la foto vemos las tablas después de cortarlas y cepillarlas.
En la imagen podemos apreciar los componentes de la galería, ya ensamblados: el larguero central, los laterales y la pieza que se fija a la pared.
Hay dos tipos de galería: están la que se encargan de sujetar la barra de nuestras cortinas y por otro lado las que no tienen funciones mecánicas y solamente se encargan de la decoración. La de nuestro amigo pertenece al primero. La barra de la cortina quedará fijada a la propia galería, por lo que debe practicarse en los extremos un rebaje, o bien atornillar soportes metálicos.
Mrl_86 ha hecho rebajes con la fresadora en las tablas laterales de todas las galerías. ¡Como vemos, nuestro amigo prepara un lote bien surtido!
Si no tenemos fresadora, nuevamente conseguiremos este hueco donde apoyar la barra recortando en el borde de la tabla una U, y encolando otra entera debajo.
El trabajo avanza con una mano de imprimación selladora, y una capa de color.
Además de los rebajes en las tablas de los extremos donde apoyará la barra, nuestro amigo también utiliza la fresadora en los largueros, para grabar unos segmentos que embellecen la galería.
Mrl_86 prosigue la tarea con los pinceles, dando otras dos manos de color y finalmente una laca mate protectora.
Y finalmente aquí vemos dos de las galerías ya montadas, aportando un toque muy cálido y elegante en las respectivas habitaciones.
¡Es una labor sencilla! ¿Te han entrado ganas de poner manos a la obra?