María sólo tiene dos semanas y mucha ropa para guardar. Así que decidí hacer una caja. Como no tenía muy claro el color rosa de la habitación pensé que lo mejor era usar varios tonos del mismo color.
Para Julia, unos lunares de diferentes rosas. Todo lijado para que parezca gastado.
Tengo que practicar lo de las letras. A pulso son muy complicadas de hacer.
Y para completar, unas servilletas.
Trocitos de servilletas por todas partes.
Están sin terminar. Todavía falta forrar la caja y unas manitas de barniz. Pero ta están casi listas.