Métodos para retirar la pintura
Existen tres métodos que facilitan la retirada de pintura de puertas y ventanas que se han visto afectadas por el contacto con el exterior:
* Método térmico. Consiste en ablandar la pintura y retirarla.
* Método mecánico. Se realiza por rascado o lijado.
* Método químico. Está basado en la aplicación de decapantes.
Procedimiento térmico
Para llevar a cabo este método se utilizan pistolas especiales de aire caliente. De esta forma, la laca antigua se reblandece y se puede retirar con una rasqueta. En los modelos modernos es posible regular la temperatura con un control electrónico. Hay máquinas que trabajan con cartuchos de gas combustible.
Método mecánico
Se trata de lijar y rascar la madera. Este trabajo se puede realizar con máquinas eléctricas o con herramientas manuales como espátulas o rasquetas.
* Las lijadoras oscilantes retiran poco material, aunque dejan una superficie muy homogénea. Son ideales para pulir superficies que ya han sido tratadas.
* Las pulidoras de bandas también eliminan poco material. Se trabaja aplicando un papel de lija de grano grueso y luego uno fino en el sentido de las vetas. Hay que moverlas continuamente, ya que si no dejan marcas profundas. Hay máquinas especiales para rincones de difícil acceso.
* En el caso de las lijadoras radiales o las delta, si se mantienen en la misma posición bastante rato también dejan marcas. Existe un accesorio opcional para adaptar platos de desbastado a esta máquina.
* Las rasquetas y espátulas se suelen emplear sólo sobre superficies planas. Se debe trabajar siempre con mucha minuciosidad para evitar daños en la madera. Conviene que las cuchillas estén bien afiladas y sin muescas, de hecho, en muchas rasquetas es fácil cambiar el canto anterior de la cuchilla.
Utilizar productos abrasivos
Hay productos químicos que permiten retirar pinturas viejas. Se venden en líquido, sprays, gel y como pastas.
Las pastas son muy adecuadas para piezas de perfiles complicados, ya que se introducen en las zonas más profundas. Su tiempo de actuación es de varias horas, y permiten retirar hasta diez capas de barniz.
Los productos en gel o líquidos deben aplicarse con un pincel. Tienen un periodo de actuación de media hora y eliminan una o dos capas de laca. La pintura debe retirarse con una rasqueta o un cepillo metálico y, a continuación, hay que limpiar la zona con agua o con una mezcla de aguarrás. En zonas pequeñas se pueden utilizar sprays. Son cómodos y limpios, aunque es preciso trabajar con ellos en habitaciones bien ventiladas.
La mayoría de estos productos son nocivos para el medio ambiente. Por ello es conveniente leer bien las instrucciones de uso, donde se indican las cantidades de sustancia emitidas, y tener presente todo lo relativo a la seguridad.