Hacía tiempo que quería cambiar el aspecto del despacho de casa. Está en una habitación muy luminosa ya que tiene un gran ventanal orientado hacia el suroeste.
Aunque me encanta el blanco (de hecho es el color predominante en las paredes de casa), tener paredes y muebles de ese color no hacía que resaltara nada en esta habitación, todo quedaba como difuminado. Por esa razón y tras ver la reforma del apartamento que publicé hace unos meses (puedes verla en este enlace), me dije ¿por qué no pintar una pared de color oscuro?
Dicho y hecho, mi chico y yo aprovechamos los días del puente de diciembre para renovar con pintura la pared principal del despacho. Para ello nos armamos con una cubeta de Bricolar de Pyma de color pizarra y un rodillo con recubrimiento de Teflon ®.
Cómo saber elegir la pintura y herramienta más adecuada
Quisiera destacar que la calidad de la pintura es muy importante a la hora de pintar. Aunque suene a tópico, lo barato sale caro y puedo dar fé porque lo he vivido en mis paredes. La pintura blanca con la que se había pintado previamente el despacho no era de buena calidad, de hecho tras cubrir con masilla algunas imperfecciones y pasar la lija, la pintura antigua empezó a transformarse en polvo.
Cuando sucede algo de este tipo, no queda más remedio que lijar toda la pared ya que es la única forma de garantizar un buen soporte para la nueva pintura. Además, después de lijar hay que limpiarla a fondo para eliminar cualquier rastro de polvo, en caso contrario la nueva pintura no se adherirá.
Para saber si una pintura es de buena calidad mi recomendación es la siguiente:
Dejarnos asesorar por profesionales del sector y en tiendas especializadas
Recurrir al “boca a boca” y preguntar a amigos
En mi caso me guié por la valoración de mi amiga Nieves que había renovado recientemente la habitación de su hijo.
Por otra parte, de poco o nada sirve tener la mejor pintura si la herramienta que utilizamos para pintar no es la más adecuada. Para ello no solo hay que tener en cuenta la calidad del tejido del rodillo sino también si es el apropiado para pintar sobre paredes lisas o rugosas.
Yo utilicé un rodillo especial para paredes lisas con un recubrimiento de Teflon ®. Este tipo de recubrimiento hace que no se apelmacen los hilos de fibra y además mejora la carga del rodillo, reduciendo el tiempo de pintado.
Recortar y pintar
Tras cubrir el zócalo, los laterales y la unión entre la pared y techo, empezó mi trabajo de recortar.
Simultáneamente, mi chico empezó a pintar la pared con el rodillo (en este enlace encontrarás algunos trucos para pintar con rodillo sin dejar marcas), aunque en algún momento le reemplacé para probar el rodillo con recubrimiento de Teflon ®. Además, el mango tiene la varilla de aluminio y resulta más ligero que otros que había probado anteriormente.
Después de la primera mano el resultado era bastante satisfactorio, aunque sería necesaria una segunda para obtener el acabado final.
A continuación puedes ver un truco para proteger el rodillo. Normalmente entre una mano y otra suelen transcurrir unas 3 ó 4 horas. En ese espacio de tiempo el rodillo no se puede dejar con pintura porque se endurece, pero tampoco conviene limpiarlo porque no se seca y humedece la pintura con agua. Para solucionar este problema existe un recipiente para guardar el rodillo que mantiene la pintura fresca ¡hasta 3 semanas! La verdad es que me ha resultado súper práctico.
¡El cambio!
Una vez se hubo secado la segunda capa de pintura colocamos un nuevo mueble de pared con más capacidad que el anterior, así como un pequeño detalle que había pensado desde hace tiempo: relojes con la hora de mis ciudades favoritas.
Para ello compré cuatro relojes de pared con el marco de plástico y los pinté con spray efecto inox.
Además, hice unos carteles con vinilo efecto acero inoxidable (puedes conocer más sobre este tipo de vinilo autoadhesivo en este enlace), cada uno con el nombre de la ciudad correspondiente.
Tras arrimar las mesas y colocar el resto de mobiliario y decoración, el cambio fue evidente ¿verdad? Personalmente solo puedo decir que estoy encantada con el resultado. El despacho no solo no ha perdido luminosidad, sino que ha ganado elegancia.
Además, ahora tengo una nueva ayudante: mi gata Siniy. No solo va a tono con el color de la pared, sino que me va a ayudar a atender el teléfono :p
Resumiendo…
Renovar con pintura es una solución económica, rápida y eficaz para transformar cualquier habitación. Para conseguir un buen resultado se ha de tener en cuenta lo siguiente:
Utilizar una pintura de calidad no solo proporciona un mejor resultado, sino que asegurará una buena base para posteriores capas de pintura.
Elegir la herramienta adecuada para garantizar un buen acabado.
Estudiar la luz, mobiliario y la distribución de la habitación a la hora de elegir el color
¿Qué te ha parecido el antes y después de renovar con pintura una de las paredes del despacho? A mi me sigue pareciendo increíble que con solo cambiar el color de una pared se pueda transformar una estancia. Estaba un poco indecisa respecto al color oscuro pero me alegro de haber apostado por él ya que resalta tanto el mobiliario como los detalles decorativos.
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