Me encantan las de color blanco. Las de toda la vida para sábanas y toallas.
Ésas que con el paso del tiempo empiezan a amarillear haciéndose más bonitas aún.
Ahora tenemos cintas, puntillas y lazos de todos los colores y formas. Para poner no sólo en la ropa, sino en prácticamente cualquier cosa que podamos imaginar.
Y los lazos del pelo: ¿A quién no le ha puesto un lazo rojo en la cabeza una madre orgullosa?
Sin duda, los hay para todos los gustos. Otro detalle pequeño que hace las cosas más bonitas.
Las fotos son todas de "El Desván de Carol". Os aconsejo una visita a su web.
Y como cada jueves, llegan los Macros del Día de Nika Vintage. Voy a cotillear las demás propuestas.