Empezamos poniendo al balcón puertas nuevas, con carpinteros por supuesto, hay cosas que yo no puedo hacer, jejejej. Al poner las puertas nuevas se nos quedo un hueco horrible de las antiguas persianas y se nos ocurrio quitar toda la moldura del techo, ufff, que locura. eso significaba reparar el techo y hay me toco remangarme la camisa, jajaja.
El siguiente paso, pintar azulejos, ya sabéis que he probado el invento en el baño de los niños y estoy encantada; los he pintado de blanco.
Este hueco se quedo cuando cambiaron la persiana, que horror para arreglarlo pues no se nos ocurría nada.
Aquí estaba intentando nivelar el suelo, pues estaba fatal.
Poniendo un suelo de gelflor de alta resistencia.
Me pillé algún que otro caprichito. (horno , cocina , televisión, mesa, sillas... )
Estos son azulejos de imitación gresite, el chico los hace personalizados en dependencia de lo que quiera el cliente, son una maravilla y le dan un toque fantástico a la cocina.
También cambie la fregadera por una más pequeña.
Esto fue otro capricho para darle un toque diferente a la cocina, es de metacrilato.
La encimera y la fontanería ( agua y gas) obra de un profesional , yo no me atrevía porque mi cocina es de gas y ya sabéis que es un rollo, mejor dejarlo a quien sepa de verdad, jejeje.
Así logramos salvar el hueco que había quedado, el de la persiana vieja. le pusimos lozas adhesivas.
Decidimos dejar las viejas puertas porque aun están muy bien, solo le cambiamos los tiradores por unos mas modernos.
Grifo nuevo.
También cogí un cestito para la esponja y tal.
Y para evitar tener el frasco del detergente encima me he decidido por poner este encastrado, cómodo y no ocupa espacio.
Con lo que me sobró de los azulejos tuneé este frasco que es para los utensilios de cocina.
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Así era de horrible antes.
El cambio radical: